La guerra, una forma torpe de retroceso e involución de la humanidad.
Cuánta enseñanza nos deja la duda del genio Albert Einstein acerca de la forma en que involucionamos con las guerras, que es la misma duda metódica de René Descartes.
De eso se trata la torpeza de la especie humana, no conforme con la loca carrera hacia un progreso incierto, ya está dando pruebas del destino de la humanidad ante tanta abominación, guerras y gasto inútil en armas, en lugar de siembra, salud y educación, amén de la creación de virus y pandemias y como guinda un ominoso desconcierto.