
Desde muy joven acostumbraba a acudir a los ritos y oraciones el primero, y siempre estaba dispuesto para ello, por lo que los amigos del pueblo le preguntaron cómo podía estar siempre así.
Fuente: Pedro A, Brioschi. Vida de San Pedro Claver Heroico Apóstol de los negros. Publicado por Garnier hermanos. 1889. Dominio público. p.7.