“Mejor que no te imagines qué sucedió exactamente con el contenido del inodoro de tu habitación, cuando utilizaste la bomba. O adónde fue el agua de la bañera, cuando quitaste el tapón del fondo. O lo que pasó después de cepillarte los dientes. ¡Oh! Es posible que todo haya ido a parar al mar en el que estás pensando bañarte; cabe la posibilidad de que el contenido del inodoro te roce suavemente el tobillo, cuando caminas despreocupado por la orilla, pues ya ves, en Antigua no existe un sistema adecuado de tratamiento de aguas residuales. Claro que el mar Caribe es enorme y el océano Atlántico aún mayor; te sorprendería saber cuántos esclavos negros se ha tragado este océano. Cuando te sientes a saborear esa deliciosa comida, vale más que ignores que la mayoría de los alimentos que estás comiendo los han traído en avión desde Miami. Y antes de que cargaran eso productos en Miami, ¿quién sabe de dónde procedían? Cabe suponer que procedían originariamente de un lugar como Antigua, donde se cultivaron a precio de saldo, antes de ser llevados a Miami y traídos de nuevo a Antigua.” Jamaica Kincaid libro A Small Place A Small Place