Baltasar Gracián: Citas de tendencias

“Conocer su mejor cualidad. Hay que cultivar la cualidad más relevante y ayudar a las demás. Cualquiera habría triunfado si hubiera conocido su mejor cualidad. Obsérvese la cualidad reina y redóblese su uso: En unos domina la inteligencia, en otros el valor. La mayoría violenta su capacidad y por eso no destaca en nada. Lo que la pasión exalta con rapidez, tarde lo desengaña el tiempo.”

“Las serpientes son las maestras de toda sagacidad: ellas nos muestran el camino de la prudencia.”

“Amar es el más poderoso hechizo para ser amado.”

“Más vale ser engañado en el precio que en la mercadería.”

“La muerte para los mozos es naufragio, y para los viejos tomar puerto.”

“A los veinte años un hombre es un pavo real, a los treinta un león, a los cuarenta un camello, a los cincuenta una serpiente, a los sesenta un perro, a los setenta un mono, a los ochenta nada.”

“Ser eminente en profesión humilde es ser grande en lo poco, es ser algo en nada.”

“Es tan difícil decir la verdad como ocultarla.”

“Confiar de los amigos hoy como enemigos mañana.”

“Es mejor consultar las cosas con la almohada a tiempo que perder el sueño por su causa después.”

“La felicidad de cada uno no consiste en esto ni en aquello sino en conseguir y gozar cada uno de lo que le gusta.”

“Pensar bien es fruto de la racionalidad. A los veinte años reina la voluntad, a los treinta el ingenio, a los cuarenta el juicio.”

“El mentiroso tiene dos males: ni cree ni es creído.”

“Bien está dos veces encerrada la lengua y dos veces abiertos los oídos, porque el oír ha de ser el doble que el hablar.”

“La confianza es madre del descuido.”

“Triste cosa es no tener amigos. Pero más triste es no tener enemigos. Porque quien enemigos no tiene, señal de que no tiene talento a quien haga sombra, ni carácter que abulte, ni valor que le teman, ni bien que le codicien, ni honor que le murmuren, ni razón alguna que le envidien.”

“Tened paciencia y tendréis ciencia.”

“La galantería y la honra tienen esta ventaja, que se quedan: aquélla en quien la usa, ésta en quien la haze.”

“Quanto que el no creer es indicio del mentir; porque el mentiroso tiene dos males, que ni cree ni es creído.”