
“Nada hay más peligroso que un amigo ignorante; es mejor un enemigo razonable.”
“Nada hay más peligroso que un amigo ignorante; es mejor un enemigo razonable.”
“No hay nada más peligroso que un amigo indiscreto; es a veces preferible un enemigo prudente.”
“El dinero no nos proporciona amigos, sino enemigos de mejor calidad.”
Sin fuentes
El frente único en el trabajo cultural. (30 de octubre de 1944), Obras Escogidas, tomo III.
1944
“Ya no tengo amigos ni enemigos.”
Pronunciada cuando, tras decidir poner fin a sus días y pedir al gladiador Espículo que le diese muerte, éste se negó por miedo a que la justicia divina lo castigara por acabar con la vida de un gran criminal como era Nerón, considerándose esto privilegio de los dioses.[Sin fuentes]
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