
„Cuanto más quiero a alguien, más tonto me pongo cuando trato de decírselo. En cuanto a ti, debo de ser el tonto más grande de todos los tiempos“
— Frank Schätzing publicista, productor musical y escritor. 1957
Fuente: http://www.youtube.com/watch?v=KS1ogWcIO5Q YouTube.com
— Frank Schätzing publicista, productor musical y escritor. 1957
— Loyola de Palacio política española 1950 - 2006
Fuente: Libertad Digital (24 de octubre de 2004) http://www.libertaddigital.com/php3/noticia.php3?cpn=1276235737.
— Cassandra Clare escritora estadounidense 1973
Tales from the Shadowhunter Academy
— Susan Elizabeth Phillips escritora estadounidense 1948
Kiss an Angel
— Charles Bukowski escritor y poeta estadounidense 1920 - 1994
— Justus von Liebig químico alemán 1803 - 1873
— Ian Curtis cantautor inglés, líder de Joy Division 1956 - 1980
Sin fuentes
— Jean Paul Sartre filósofo, escritor y activista francés 1905 - 1980
La Náusea
Variante: Existo. Es algo tan dulce, tan dulce, tan lento. Y leve; como si se mantuviera solo en el aire. Se mueve. Por todas partes, roces que caen y se desvanecen. Muy suave, muy suave
Fuente: Citado en Tallis, Raimond. El reino del espacio infinito: Un viaje fantástico alrededor de la cabeza humana. Editorial Grupo Planeta Spain, 2009. ISBN 9788483078655, pp. 48-49.
— Élisée Reclus geógrafo, escritor y anarquista francés 1830 - 1905
Sin fuentes
— Miguel de Cervantes escritor español 1547 - 1616
— Roberto Fontanarrosa Humorista gráfico y escritor argentino 1944 - 2007
Aforismos
— José Saramago escritor, novelista, poeta, periodista y dramaturgo portugués 1922 - 2010
Citas ordenadas
— Clarice Lispector escritora ucraniana-brasileña 1920 - 1977
The Passion According to G.H.
— Mario Benedetti escritor uruguayo 1920 - 2009
El amor, las mujeres y la vida
— Viktor Frankl, libro El hombre en busca de sentido
Man's Search for Meaning
Variante: La conciencia del amor propio está tan profundamente arraigada en las cosas más elevadas y más espirituales, que no puede arrancarse ni viviendo en un campo de concentración. ¿Pero cuántos hombres libres, por no hablar de los prisioneros, lo poseen?