
„Tenía muchos pecados que expiar. Pecados tan grandes que dos mil años de cautiverio ni siquiera bastaban para enmendarlos.
No solo era un bastardo por nacimiento; tras una vida brutal, plagada de desesperación y traiciones, había acabado convirtiéndose en uno de verdad.
Cerró los ojos y se obligó a alejar esos pensamientos. Eso era, nunca mejor dicho, historia antigua y en esos momentos se encontraba en el presente. Grace era el presente.
Y estaba allí por ella.“
— Sherrilyn Kenyon, Fantasy Lover
Fantasy Lover

„[…] No creo que sea de la incumbencia de mis pacientes si soy o no la reencarnación de la Virgen. Y con respecto a la Era de la Electrónica, no quiero tener una relación con algo que funciona a pilas y viene acompañado de una etiqueta con advertencias.
Selena soltó un bufido.
—Ya, bueno, pues déjame decirte una cosa: la mayoría de los hombres tendrían que venir acompañados de una etiqueta con advertencias. —Alzó las manos para enmarcar la siguiente afirmación—: «Atención, por favor, Alerta Psicótica. Yo, macho-man, soy propenso a sufrir horribles cambios de humor y a poner caras largas; además, poseo la habilidad de decir la verdad a una mujer sobre su peso sin previo aviso».“
— Sherrilyn Kenyon, Fantasy Lover
Fantasy Lover

„Pero puede hacer que la gente se enamore.
—No —le contestó, apretando con más fuerza el colgante entre sus dedos—. Lo que él ofrece es una ilusión. Ningún poder celestial puede conseguir que un humano ame a otro. El amor proviene del corazón —confesó con un deje atormentado en la voz.
Grace buscó su mirada.
—Hablas como si lo supieras de primera mano.
—Lo sé.“
— Sherrilyn Kenyon, Fantasy Lover
Fantasy Lover

„[…] ¿Qué es lo que tiene que nos hace olvidar nuestra voluntad? —preguntó.
Julian arqueó una ceja con un gesto arrogante.
—¿Yo te atraigo en contra de tu voluntad?
—Para serte sincera, sí. No me gusta sentirme de este modo.
—¿Y cómo te sientes? —le preguntó él.
—Sexy —le contestó antes de pensarlo dos veces.
—¿Como si fueras una diosa? —preguntó él de nuevo con voz ronca.
—Sí —respondió sin más cuando Julian se acercó a ella.
[…]
—Yo puedo decirte de qué se trata —ronroneó Julian.
—Es la maldición, ¿verdad?
El hombre negó con la cabeza al tiempo que alzaba una mano para pasarle el dedo muy lentamente por el pómulo. Grace cerró los ojos con fuerza al sentir que la consumía una feroz oleada de deseo. Le estaba costando la misma vida no girar la cabeza para atrapar ese dedo con los dientes.
Julian se inclinó un poco más para frotar su mejilla contra la de ella.
—Se trata del hecho de que yo aprecio en ti cosas que los hombres de tu época ni siquiera ven.“
— Sherrilyn Kenyon, Fantasy Lover
Fantasy Lover

„Cerró los ojos, echó la cabeza hacia atrás y se permitió soñar por primera vez desde hacía siglos. Soñó con pasar noches enteras junto a Grace. Soñó con pasar días llenos de risas a su lado.
Soñó que llegaba el día en que podía amarla como ella se merecía. Un día en que sería libre para poder entregarse a ella. Soñó en tener un hogar junto a Grace.
Y sobre todo, soñó con niños de alegres ojos grises y sonrisas dulces y traviesas.“
— Sherrilyn Kenyon, Fantasy Lover
Fantasy Lover

„Grace apretó los dientes al ver el rechazo en los ojos de Julian. No obstante, ¿quién podría culparlo?
Lo habían herido en incontables ocasiones. Sin embargo, de algún modo, de alguna forma, lograría demostrarle lo mucho que significaba para ella.
Tenía que hacerlo. Porque perderlo significaría la muerte para ella.“
— Sherrilyn Kenyon, Fantasy Lover
Fantasy Lover