
“La oración es realmente así de sencilla. Resístete al impulso de complicarla. No te sientas orgulloso por las oraciones muy elaboradas. No pidas disculpas por las oraciones incoherentes. Nada de juegos. Sin encubrimientos. Simplemente sé sincero… sincero con Dios. Súbete a su regazo. Cuéntale todo lo que hay en tu corazón. O no le digas nada. Solo eleva tu corazón al cielo y declara: Padre… Papito…”
Antes del amén: El poder de una oración sencilla
Citas similares


“Una oración por lo salvaje del corazón que es conservado en jaulas”

Fuente: Ortega Blake, Arturo. El gran libro de las frases célebres. Editorial Penguin Random House Grupo Editorial México, 2013 ISBN 978-60-7311-631-2.

“Mucha oración, mucho poder. Poca oración, poco poder. Falta de oración, falta de poder”.”
El plan Daniel: 40 dias hacia una vida mas saludable