
“No, porque no escuche nada de lo que has dicho.”
Habiéndolo fastidiado alguien con un largo discurso y diciéndole al final «Quizás lo he aburrido con demasiadas palabras».
Fuente: Cuenta y razón, números 5-8. Colaborador Fundación de Estudios Sociológicos. Editorial Fundación de Estudios Sociológicos, 1982. p. 23.
“No, porque no escuche nada de lo que has dicho.”
Habiéndolo fastidiado alguien con un largo discurso y diciéndole al final «Quizás lo he aburrido con demasiadas palabras».
“hay cosas que dichas duelen a quien las escucha y no sanan a quien las comparte”
Un perro
“Entrega al mar
tu aliento.
Escucha a la mañana,
su ecuación de misterios.”