“Nuestra vida puede ser la última que se vivirá en una sociedad tecnológica.”

“Vivir por vivir, para gozar ásperamente, profundamente de todo aquello que ofrece la vida, para saborear hasta la última gota la copa de delicias y sorpresas que la vida tiende a quien toma conciencia de su propio ser.”

Émile Armand (1872–1962)

“¡No puedo vivir sin mi vida! ¡No puedo vivir sin mi alma!”

Emily Brontë libro Cumbres Borrascosas

Wuthering Heights

“Se puede ser un cielo en la vida y un pedazo de mierda en el campo, también se puede ser gloria bendita en el campo y un pedazo de mierda en la vida, pero esto último es mucho más perdonable.”

Ray Loriga (1967)

Lo peor de todo

“Para quien no puede no sabe o no quiere vivir, la vida puede ser demasiado larga y angustiosa.”

José Luis Rodríguez Jiménez

“El ser humano es un ser social por naturaleza, y el insocial por naturaleza y no por azar o es mal humano o más que humano… La sociedad es por naturaleza y anterior al individuo… el que no puede vivir en sociedad, o no necesita nada por su propia suficiencia, no es miembro de la sociedad, sino una bestia o un dios.”

Aristoteles (-384–-321 a.C.) filósofo griego clásico

“Para lograr un éxito tecnológico, la realidad debe estar por encima de las relaciones públicas, porque la Naturaleza no puede ser engañada.”

Richard Feynman (1918–1988) físico estadounidense y premio Nobel

“Quien es capaz de vivir en sociedad y no tiene necesidad de ella, porque se basta a sí mismo, tiene que ser un animal o un dios.”

Aristoteles (-384–-321 a.C.) filósofo griego clásico

“¡Oh, Dios mío, es inconcebible! ¡No puedo vivir sin mi vida! ¡No puedo vivir si mi alma!”

Emily Brontë libro Cumbres Borrascosas

Wuthering Heights

“Comprender el sentido último de la vida es uno de los grandes desafíos de la ciencia y la metafísica, pero al ser humano común lo que le importa es encontrar razones que le den sentido a vivir la suya.”

José Luis Rodríguez Jiménez

“En la última etapa de la madurez, sin ser ya imprescindible para los seres más queridos, y en ausencia de un enérgico y alentador sentido para vivir; el objetivo de tener un final sereno, digno y sin sufrimiento, puede ser en un pensamiento lógico y positivo.”

José Luis Rodríguez Jiménez