“Tenía esa belleza de la que sólo los vencidos son capaces.” Alessandro Baricco libro Ocean Sea Ocean Sea
“Es una especie de misterio, pero hay que intentear entenderlo, sirviéndose de la fantasía, y olvidar lo que se sabe de modo que la imaginación pueda vagabundear en libertad, corriendo lejos por el interios de las cosas hasta ver que el alma no es siempre diamante sino a veces velo de seda-esto puedo entenderlo-imagínate un velo de seda trasparente, cualquier cosa podría rasgarlo, incluso una mirada, y piensa en la mano que lo coge- una mano de mujer- sí- se mueve lentamente y lo aprieta entre los dedos, pero apretarlo es ya demasiado, lo levanta como si no fuera una mano, sino un golpe de viento, y lo encierra entre los dedos como si no fueran dedos sino…- como si no fueran dedos sino pensamientos. Así es. Esta habitación es esa mano, y mi hija es un velo de seda […]- Edel, ¿hay algún modo de conseguir hombres que no hagan daño?Eso debe habérselo preguntado Dios también, en su momento.- No lo sé, pero lo intentaré” Alessandro Baricco libro Ocean Sea Ocean Sea
“Ann Deveriá la miró -pero con una mirada para la que mirar es ya una palabra demasiado fuerte –mirada maravillosa que es ver sin preguntarse nada, ver y basta –algo como dos cosas que se tocan– los ojos y la imagen –una mirada que no toma sino que recibe, en el silencio más absoluto de la mente, la única mirada que de verdad podría salvarnos –virgen de cualquier pregunta, aún no desfigurada por el vicio de saber –única inocencia que podría prevenir las heridas de las cosas cuando desde fuera penetran en el círculo de nuestro sentir –ver –sentir –porque no sería más que un maravillosos estar delante, nosotros y las cosas, y en los ojos recibir el mundo entero –recibir –sin preguntas, incluso sin asombro –recibir –sólo –recibir –en los ojos– el mundo.” Alessandro Baricco libro Ocean Sea Ocean Sea
“Después no es que la vida vaya como tú te la imaginas. Sigue su camino. Y tú el tuyo. Y no son el mismo camino. Es así… No es que yo quisiera ser feliz, eso no. Quería… salvarme, eso es, salvarme. Pero comprendí tarde por qué lado había que ir: por el lado de los deseos. Uno espera que sean otras cosas las que salven a la gente: el deber, la honestidad, ser buenos, ser justos. No, los deseos son los que nos salvan. Son lo único verdadero. Si estás con ellos, te salvarás. Pero lo comprendí demasiado tarde. Si a la vida le das tiempo, muestra extraños recovecos, inexorables: y adviertes que, llegado ese momento, no puedes desear nada sin hacerte daño.” Alessandro Baricco libro Ocean Sea Ocean Sea
“Edel, ¿hay algún modo de conseguir hombres que no hagan daño?Eso debe de habérselo preguntado Dios también, en su momento.” Alessandro Baricco libro Ocean Sea Ocean Sea