
„Cuando el cristianismo abandonó su primitivo terreno, es decir, los estratos sociales más humildes, el subsuelo del mundo antiguo; cuando alcanzó poderío entre los pueblos bárbaros, no contó ya, como condición preliminar en su nuevo terreno, con hombres fatigados, sino con hombres interiormente salvajes que se destrozaban recíprocamente: el hombre fuerte, pero mal constituido.“
— Friedrich Nietzsche filósofo alemán 1844 - 1900
EL ANTICRISTO: Clásicos de la literatura