Frases sobre deportivo

Una colección de frases y citas sobre el tema del deportivo, mejora, ser, ver.

Frases sobre deportivo

Chi­ma­man­da Ngo­zi Adi­chie Foto
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“Messi a veces juega para Messi. Todavía se olvida de sus compañeros. Muchas veces se convierte en 'Deportivo Messi' porque juega para él.”

Diego Armando Maradona (1960) futbolista y entrenador de fútbol argentino

Fuente: Maradona dispara: "Messi es demasiado individualista, a veces se convierte en 'Deportivo Messi'" - Deportes - Perfil.com - 11 de septiembre de 2008 http://www.perfil.com/contenidos/2008/09/11/noticia_0013.html

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“Cuando me llamó el Barça no pensé en el dinero. Voy a ganar mucho en el capítulo deportivo.”

Javier Mascherano (1984) futbolista argentino

Fuente: Javier Mascherano: "No pensé en dinero, sí en lo deportivo" http://www.lavozlibre.com/noticias/ampliar/101077/javier-mascherano-no-pense-en-dinero-si-en-lo-deportivo

José María del Nido Foto

“A día de hoy el Betis, a nivel deportivo, no es rival del Sevilla.”

José María del Nido (1957) Casado con Serena Williams

Sin fuentes
Antes de empezar la Liga 2006-2007. El Sevilla acabaría tercero en esta Liga, y el Betis en el puesto 14.
Como presidente

Miguel Calero Foto
Miguel Calero Foto
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“El Chelsea me daba dinero; el Barça, un reto deportivo.”

Deco (1977) futbolista brasileño-portugués

Fuente: Mundo Deportivo http://hemeroteca-paginas.mundodeportivo.com./EMD01/PUB/2005/02/21/EMD20050221005MDP.pdf

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“Hoy esos hombres y mujeres van a Tailandia, a Filipinas, a Botswana, a Bolivia y a cualquier parte donde esperan encontrar gentes que necesitan con desesperación un trabajo. Van a esos países con la intención deliberada de explotar a los desdichados, a seres que tienen hijos desnutridos o famélicos, que viven en barrios de chabolas y que han perdido toda esperanza de una vida mejor; que incluso han dejado de soñar en un futuro. Esos hombres y mujeres salen de sus fastuosos despachos de Manhattan, de San Francisco o de Chicago, se desplazan entre los continentes y los océanos en lujosos jets, se alojan en hoteles de primera categoría y se agasajan en los mejores restaurantes que esos países puedan ofrecer. Luego salen a buscar gente desesperada.
Son los negreros de nuestra época. Pero ya no tienen necesidad de aventurarse en las selvas de África en busca de ejemplares robustos para venderlos al mejor postor en las subastas de Charleston, Cartagena o La Habana. Simplemente reclutan a esos desesperados y construyen una fábrica que confeccione las cazadoras, los pantalones vaqueros, las zapatillas deportivas, las piezas de automoción, los componentes para ordenadores y los demás miles de artículos que aquéllos saben colocar en los mercados de su elección. O tal vez prefieren no ser los dueños de esas fábricas, sino que se limitan a contratar con los negociantes locales, que harán el trabajo sucio por ellos.
Esos hombres y mujeres se consideran gente honrada. Regresan a sus países con fotografías de lugares pintorescos y de antiguas ruinas, para enseñárselas a sus hijos. Asisten a seminarios en donde se dan mutuas palmadas en las espaldas e intercambian consejos sobre cómo burlar las arbitrariedades aduaneras de aquellos exóticos países. Sus jefes contratan abogados que les aseguran la perfecta legalidad de lo que ellos y ellas están haciendo. Y tienen a su disposición un cuadro de psicoterapeutas y otros expertos en recursos humanos, para que les ayuden a persuadirse de que, en realidad, están ayudando a esas gentes desesperadas.
El esclavista a la antigua usanza se decía a sí mismo que su comercio trataba con una especie no del todo humana, a cuyos individuos ofrecía la oportunidad de convertirse al cristianismo. Al mismo tiempo, entendía que los esclavos eran indispensables para la supervivencia de su propia sociedad, de cuya economía constituían el fundamento. El esclavista moderno se convence a sí mismo (o a sí misma) de que es mejor para los desesperados ganar un dólar al día que no ganar absolutamente nada. Y además se les ofrece la oportunidad de integrarse en la más amplia comunidad global. Él o ella también comprenden que esos desesperados son esenciales para la supervivencia de sus compañías, y que son los fundamentos del nivel de vida que sus explotadores disfrutan. Nunca se detienen a reflexionar sobre las consecuencias más amplias de lo que ellos y ellas, su nivel de vida y el sistema económico en que todo eso se asienta están haciéndole al planeta, ni sobre cómo, finalmente, todo eso repercutirá en el porvenir de sus propios hijos.”

Confesiones de un gángster económico

Gioconda Belli Foto
Dani Pedrosa Foto
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Mario Sequeira Foto

“Es una universidad con bastantes facilidades, tanto para la parte deportiva como la académica. Saprissa me dio un valor importantísimo que es la disciplina. Es posible ser atleta y llevar los estudios de forma paralela, Saprissa me dio ese balance. Es parte de la excelencia que se enseña acá.”

Mario Sequeira (1997) futbolista costarricense

Citas de
Fuente: Página oficial del Saprissa http://www.deportivosaprissa.com/index.php/2017/07/12/mario-sequeira-recibio-una-beca-universitaria-en-estados-unidos/.

Miguel Pizarro Rodríguez Foto

“Nos encargamos de trabajar en la formación para cuerpos de seguridad, de establecer responsabilidades claras entre todos los que tienen que ver con la organización del evento deportivo y de comenzar a construir soluciones para este problema.”

Miguel Pizarro Rodríguez (1988) Diputado venezolano

Pizarro refiriéndose al problema de violencia en eventos deportivos en Venezuela
Asamblea Nacional
Fuente: Ley contra la Violencia en el Deporte fue presentada en la AN, Diario 2001, 9 de junio de 2015, 7 de julio de 2015 http://www.2001.com.ve/en-la-agenda/100055/ley-contra-la-violencia-en-el-deporte-fue-presentada-en-la-an.html,