Frases de Patrick Süskind

Patrick Süskind
Fecha de nacimiento: 26. Marzo 1949
Otros nombres: پاتریک زوسکیند
Patrick Süskind es un escritor y guionista de cine alemán.
Obras
Frases Patrick Süskind
„… con un gesto apacible, un movimiento de la cabellera, un solo y lento destello de la mirada dominaba el espacio y permanecen tranquilas como en el centro de un ciclón, al parecer ignorantes de la propia fuerza de atracción, que arrastra hacia ellas de modo irresistible los anhelos y las almas tanto de hombre como mujeres.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Este presentimiento resultaría cierto, aunque se basaba en premisas totalmente falsas.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Sus excrementos era todo lo que daba al mundo; ni una sonrisa, ni un grito, ni un destello en la mirada, ni siquiera el propio olor.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Porque los hombres podían cerrar los ojos ante la grandeza, ante el horror, ante la belleza, y cerrar los oídos a las melodías o las palabras seductoras, pero no podían sustraerse al perfume. Porque el perfume era hermano del aliento. Con él se introducía en los hombres y si éstos querían vivir, tenían que respirarlo. Y una vez en su interior, el perfume iba directo al corazón y allí decidía de modo categórico entre inclinación y desprecio, aversión y atracción, amor y odio. Quien dominaba los olores, dominaba el corazón de los hombres.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Entonces de repente –éste era el sentido del ejercicio-, el odio brotaba en él con violencia de orgasmo, estallando como una tormenta contra aquellos olores que habían osado ofender su ilustre nariz. Caía sobre ellos como granizo sobre un campo de trigo, los pulverizaba como una furioso huracán y los ahogaba bajo un diluvio purificador de agua destilada. Tan justa era su cólera y tan grande su venganza.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„El olor de mar le gustaba tanto, que deseaba respirarlo puro algún día y en grandes cantidades, a fin de embriagarse de él.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Encontrar el camino no era difícil, lo difícil era luchar contra el recuerdo de la pesadilla claustrofóbica, que avanzaba en su interior, como una marea… Pero tenía valor; es decir, luchaba contra el miedo de no saber, contra el temor de la incertidumbre, y su lucha era efectiva porque sabía que no podía escoger.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„No dejo de observar que el propósito del perfume era conseguir un efecto embriagador y atrayente y reconocía la bondad de las diferentes esencias de las que estaban compuestos, pero en conjunto le parecían más bien toscos y pesados, chapuceros más que sutiles.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„El grito derrumbó las paredes,…, salió del corazón, cruzó tumbas, pantanos y desiertos, pasó a gran velocidad por el paisaje nocturno de su alma, como un voraz incendio,… e irrumpió en el mundo, resonando mucho más allá de la altiplanicie… Si el grito no hubiese rasgado la niebla, se habría asfixiado así mismo: una muerte espantosa.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Y lo olía con más exactitud de la que muchos lo veían, ya que lo percibía en su interior y por ello de manera más intensa: como la esencia, el espíritu de algo pasado que no sufre la perturbación de los atributos habituales del presente, como el ruido, la algarabía, el repugnante hacinamiento de los hombres.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„En la época que nos ocupa reinaba en las ciudades un hedor apenas concebible para el hombre moderno. Las calles apestaban a estiércol, los patios interiores apestaban a orina, los huecos de las escaleras apestaban a madera podrida y excremento de rata; las cocinas, a col podrida y grasa de carnero; los aposentos sin ventilación apestaban a polvo enmohecido; los dormitorios, a sábanas grasientas, a edredones húmedos y al penetrante olor dulzón de los orinales. Las chimeneas apestaban a azufre; las curtidurías, a lejías cáusticas; los mataderos, a sangre coagulada. Hombres y mujeres apestaban a sudor y a ropa sucia; en sus bocas apestaban los dientes infectados, los alientos olían a cebolla y los cuerpos, cuando ya no eran jóvenes, a queso rancio, a leche agria y a tumores malignos. Apestaban los ríos, apestaban las plazas, apestaban las igelsias y el hedor se respiraba por igual bajo los puentes y en los palacios. El campesino apestaba como el clérigo; el official de artesano, como la esposa del maestro; apestaba la nobleza entera y, sí, incluso el rey apestaba como un animal carnicero y la reina como una cabra vieja, tanto en verano como en invierno.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„… era realmente demasiado agradable, casi su número favorito entre todos los representantes en el escenario de su gran teatro interior, porque comunicaba la maravillosa sensación de agotamiento placentero que sigue a todo acto verdaderamente grande y heroico.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„Sintió como la sangre caliente volvía a darle vida y como se apoderaba de él la voluntad de llevar a cabo lo que se había propuesto, incluso con más fuerza que antes, porque ahora la voluntad no tenía su origen en un simple anhelo, sino que había surgido de una decisión meditada… Poseía para ello una personalidad demasiado tenaz, un temperamento demasiado retorcido y un espíritu demasiado refinado.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer
„No podía oler la falta de olor del niño y no esperaba ninguna emoción de él porque su propia alma estaba sellada.“
— Patrick Süskind, libro El perfume
Perfume: The Story of a Murderer