Frases sobre bestias
página 2

William Shakespeare Foto
Vicente Blasco Ibáñez Foto
Franz Kafka Foto
Julio Cortázar Foto
George Orwell Foto
Umberto Eco Foto
Jaime Manrique Foto
Nancy Morejón Foto

“Mujer negra

Todavía huelo la espuma del mar que me hicieron atravesar.
La noche, no puedo recordarla.
Ni el mismo océano podría recordarla.
Pero no olvido el primer alcatraz que divisé.
Altas, las nubes, como inocentes testigos presenciales.
Acaso no he olvidado ni mi costa perdida, ni mi lengua ancestral
Me dejaron aquí y aquí he vivido.
Y porque trabajé como una bestia,
aquí volví a nacer.
A cuanta epopeya mandinga intenté recurrir.

Me rebelé.
Su Merced me compró en una plaza.
Bordé la casaca de su Merced y un hijo macho le parí.
Mi hijo no tuvo nombre.
Y su Merced murió a manos de un impecable lord inglés.

Anduve.
Esta es la tierra donde padecí bocabajos y azotes.
Bogué a lo largo de todos sus ríos.
Bajo su sol sembré, recolecté y las cosechas no comí.
Por casa tuve un barracón.
Yo misma traje piedras para edificarlo,
pero canté al natural compás de los pájaros nacionales.

Me sublevé.
En esta tierra toqué la sangre húmeda
y los huesos podridos de muchos otros,
traídos a ella, o no, igual que yo.
Ya nunca más imaginé el camin a Guinea.
¿Era a Guinea? ¿A Benín? ¿Era a
Madagascar? ¿O a Cabo Verde?
Trabajé mucho más.
Fundé mejor mi canto milenario y mi esperanza.
Aquí construí mi mundo.

Me fui al monte.
Mi real independencia fue el palenque
y cabalgué entre las tropas de Maceo.
Sólo un siglo más tarde,
junto a mis descendientes,
desde una azul montaña.

Bajé de la Sierra
Para acabar con capitales y usureros,
con generales y burgueses.
Ahora soy: sólo hoy tenemos y creamos.
Nada nos es ajeno.
Nuestra la tierra.
Nuestros el mar y el cielo.
Nuestras la magia y la quimera.
Iguales míos, aquí los veo bailar
alrededor del árbol que plantamos para el comunismo.
Su pródiga madera ya resuena.”

Nancy Morejón (1944) escritora cubana
Platón Foto
Jean Jacques Rousseau Foto
Arturo Pérez-Reverte Foto
Ayn Rand Foto

“El dinero reconoce que el hombre no es una bestia de carga nacida para transportar el fardo de su propia miseria”

Ayn Rand (1905–1982) filósofa y escritora estadounidense

La Rebelión de Atlas

Carlos Ruiz Zafón Foto
Patricia Highsmith Foto
Charles Baudelaire Foto

“»En verdad, querida, me molestáis sin tasa y compasión; diríase, al oíros suspirar, que padecéis más que las espigadoras sexagenarias y las viejas pordioseras que van recogiendo mendrugos de pan a las puertas de las tabernas.
»Si vuestros suspiros expresaran siquiera remordimiento, algún honor os harían; pero no traducen sino la saciedad del bienestar y el agobio del descanso. Y, además, no cesáis de verteros en palabras inútiles: ¡Quiéreme! ¡Lo necesito «tanto»! ¡Consuélame por aquí, acaríciame por «allá»! Mirad: voy a intentar curaros; quizá por dos sueldos encontremos el modo, en mitad de una fiesta y sin alejarnos mucho.
»Contemplemos bien, os lo ruego, esta sólida jaula de hierro tras de la cual se agita, aullando como un condenado, sacudiendo los barrotes como un orangután exasperado por el destierro, imitando a la perfección ya los brincos circulares del tigre, ya los estúpidos balanceos del oso blanco, ese monstruo hirsuto cuya forma imita asaz vagamente la vuestra.
»Ese monstruo es un animal de aquéllos a quienes se suelen llamar “¡ángel mío!”, es decir, una mujer. El monstruo aquél, el que grita a voz en cuello, con un garrote en la mano, es su marido. Ha encadenado a su mujer legítima como a un animal, y la va enseñando por las barriadas, los días de feria, con licencia de los magistrados; no faltaba más.
¡Fijaos bien! Veis con qué veracidad —¡acaso no simulada!— destroza conejos vivos y volátiles chillones, que su cornac le arroja. “Vaya —dice éste—, no hay que comérselo todo en un día”; y tras las prudentes palabras le arranca cruelmente la presa, dejando un instante prendida la madeja de los desperdicios a los dientes de la bestia feroz, quiero decir de la mujer.”

Paris Spleen

Steven D. Levitt Foto

“Me acerqué a pedirle al encargado que me diera la nueva llave, me arrastré hasta mi apartamento y estudié mi nueva cerradura. Grande, metálica y brillante. No tenía ni un rasguño. Incluso la llave tenía grabada una muesca extraña, que le proporcionaba un sistema a prueba de ladrones. Chúpate esa, Su Majestad.
Abrí la puerta, entré y la cerré de nuevo. Me descalcé, estremeciéndome por el dolor en el estómago. Iba a tardar mucho tiempo en curarse por completo, pero al menos ya había dejado de sangrar.
Me había relajado. Mañana ya me preocuparía de Hugh d'Ambray, Andrea y Roland, pero de momento me sentía muy contenta. Ah, mi casa. Mi hogar, mis esencias, mi querida alfombra bajo mis pies, mi cocina, mi Curran sentado en la silla de la cocina… ¡Espera un momento!
-¡Tú! -Miré la cerradura, lo miré a él. Era demasiado bueno para la puerta a prueba de ladrones.
Con mucha parsimonia, acabó de escribir algo en un trozo de papel, se levantó y se dirigió hacia mí. Mi corazón se desbocó. Unas pequeñas chispas doradas danzaban en sus ojos grises. Me tendió el trozo de papel y sonrió.
-No puedo quedarme.
Me quedé mirándolo como una idiota.
Inhaló mi aroma, abrió la puerta y se marchó. Entonces miré el papel.
Voy a estar ocupado las próximas ocho semanas, así que lo dejamos para el quince de noviembre.
MENÚ
Quiero un filete de cordero o de venado. Patatas asadas con mantequilla dulce. Mazorcas de maíz. Panecillos. Y una tarta de manzana, como la que preparaste la otra vez. Me gustó muchísimo. La quiero con helado.
Me debes una cena desnuda, pero no soy un completo animal, por lo que puedes llevar sujetador y braguitas si lo deseas. Las azules con lazo me encantan.
Curran
Señor de las Bestias de Atlanta”

Magic Strikes

Aldous Huxley Foto

“«Ahora me doy cuenta de que el verdadero encanto de la vida intelectual —la vida consagrada a la erudición, a las investigaciones científicas, a la filosofía, a la estética, a la crítica— es su facilidad. Es la sustitución de las complejidades de la realidad por simples esquemas intelectuales, o de los desconcertantes movimientos de la vida por la muerte formal y tranquila. Es incomparablemente más fácil saber muchas cosas, por ejemplo, acerca de la historia del arte y tener ideas profundas acerca de la metafísica y de la sociología, que saber intuitiva y personalmente algo acerca de nuestros semejantes, y llevar relaciones satisfactorias con nuestros amigos y nuestras amantes, nuestra mujer y nuestros hijos. Vivir es mucho más difícil que el sánscrito, la química o la economía política. La vida intelectual es un juego de niños; lo cual explica el que los intelectuales tiendan a convertirse en niños, y luego en imbéciles, y finalmente, como claramente de muestra la historia política e industrial de los últimos siglos, en lunáticos homicidas y bestias salvajes. Las funciones reprimidas no mueren; se deterioran, degeneran, retrogradan al estado primitivo. Pero, entretanto, es mucho más fácil ser un niño intelectual, o un lunático, o una bestia, que un hombre adulto y armonioso. He ahí por qué, entre otras razones, existe tanta demanda de educación superior. Las gentes se abalanzan hacia los libros y las universidades como hacia los cafés. Quieren ahogar su conciencia de las dificultades que presenta el vivir adecuadamente en este grotesco mundo contemporáneo: quieren olvidar su deplorable insuficiencia en el arte de la vida. Algunos ahogan sus penas en alcohol, mientras que otros, todavía más numerosos, las ahogan en los libros y en el diletantismo artístico; algunos tratan de olvidarse a sí mismos por medio de la fornicación, el baile, el cinematógrafo, la radiotelefonía; otros, por medio de conferencias y ocupaciones científicas. Los libros y las conferencias son mejores para ahogar las penas que la bebida y la fornicación: no dejan dolor de cabeza, ni aquella desesperante sensación del post coitum triste.»”

Point Counter Point

Robert Anton Wilson Foto

“Fue la Belleza quien mató a la Bestia…”

Robert Anton Wilson (1932–2007)

Escena final de King Kong,de Merian C. Cooper (1933).
Fuente: El martillo cósmico. Libro II: Con los pies en la tierra.

Juan Pablo Montoya Foto

“Y esa era la bestia paralizada la que me iba a meter miedo sobre el final de la carrera…”

Juan Pablo Montoya (1975) Piloto de carreras colombiano (n.1975)

Michael Schumacher.

William Beckford Foto

“Es un gran mal mirar a la humanidad con una visión demasiado clara. Parece que vives entre las bestias salvajes y te conviertes en una bestia salvaje.”

William Beckford (1760–1844) novelista inglés

Citas por obras, Vathek with The Episodes of Vathek
Original: «It is a great evil to look upon mankind with too clear vision. You seem to be living among wild beasts, and you become a wild beast yourself».
Fuente: Página 163. https://books.google.es/books?id=a08j7jDP7McC&pg=PA163&dq=It+is+a+great+evil+to+look+upon+mankind+with+too+clear+vision.+You+seem+to+be+living+among+wild+beasts,+and+you+become+a+wild+beast+yourself&hl=es&sa=X&ved=0ahUKEwic7PeYhtrgAhXixoUKHW_LAlYQ6AEIKzAA#v=onepage&q=It%20is%20a%20great%20evil%20to%20look%20upon%20mankind%20with%20too%20clear%20vision.%20You%20seem%20to%20be%20living%20among%20wild%20beasts%2C%20and%20you%20become%20a%20wild%20beast%20yourself&f=false

Fidel Castro Foto

“El mercado es una bestia salvaje, caótica e incontrolable.”

Fidel Castro (1926–2016) Ex Presidente de Cuba y Ex Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba

Conferencia magistral en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, 24/8/1998 http://www.cuba.cu/gobierno/discursos/1998/esp/f240898e.html.

Francisco de Quevedo Foto
Baruch Spinoza Foto
Samuel Butler (poeta) Foto

“El cazador: Es un perro de caza auxiliar que ayuda a unas bestias a someter y exterminar a otras… Sufre también, a su manera, pero aunque lo considero un juego]] y un deporte porque no sirve ningún propósito, hace todo lo que puede para que los demás sepan lo duro que es. Haga lo que haga la liebre, al final le llevará al cazador a la taberna donde este disfrutará inventando sus hazañas…”

Samuel Butler (poeta) (1612–1680)

«Caracteres» (en Remains 1759-obra póstuma)
Original: «A hunter: Is an auxiliary hound that assists one nation of beasts to subdue and overrun another... He takes very great pains in his way, but calls it game and sport because it is to no purpose; and he is willing to make as much of it as he can, and not be thought to bestow so much labour and pains about nothing. Let the hare take which way she will, she seldom fails to lead him at long-running to the alehouse, where he meets with an after-game of delight in making up a narrative...».
Fuente: [Morley] (1891).
Fuente: Remains, vol. 2 (1759)

Alberto Jiménez Ure Foto
Alberto Jiménez Ure Foto

“«El sujeto te inflige golpes y ningunea arreándote en corredor de bestias»”

Fuente: http://www.soypoeta.com/rsp/urescritor/poema/filosofurias/menu-id-53

Alberto Jiménez Ure Foto