Frases de Gabriel García Márquez
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Gabriel José de la Concordia García Márquez , más conocido como Gabriel García Márquez , fue un escritor, novelista, cuentista, guionista, editor y periodista colombiano. En 1982 recibió el Premio Nobel de Literatura.

Fue conocido familiarmente y por sus amigos como Gabito , o por su apócope Gabo desde que Eduardo Zalamea Borda, subdirector del diario El Espectador, comenzara a llamarlo así.

Está relacionado de manera inherente con el realismo mágico y su obra más conocida, la novela Cien años de soledad, es considerada una de las más representativas de este movimiento literario e incluso se considera que por el éxito de la novela es que tal término se aplica a la literatura surgida a partir de los años sesenta en Latinoamérica. En 2007, la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española lanzaron una edición popular conmemorativa de esta novela, por considerarla parte de los grandes clásicos hispánicos de todos los tiempos.

Fue famoso tanto por su genialidad como escritor como por su postura política. Su amistad con el líder cubano Fidel Castro causó mucha controversia en el mundo literario y político.

✵ 6. marzo 1927 – 17. abril 2014   •   Otros nombres Gabriel José García Márquez
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Gabriel García Márquez Frases y Citas

“… No encontraba por dónde empezar a vivir.”

Los funerales de la Mamá Grande

“No importa. El que espera lo mucho espera lo poco.”

El coronel no tiene quien le escriba
Variante: El que espera lo mucho espera lo poco.

“La edad no es la que uno tiene sino la que uno siente.”

Memories of My Melancholy Whores

“«Es una lástima, porque la incomunicación con los caballos ha retrasado a la humanidad», dijo Abrenuncio. «Si alguna vez la rompiéramos podríamos fabricar el centauro»”

Of Love and Other Demons
Variante: «Es una lástima, porque la incomunicación con los caballos ha retrasado a la humanidad», dijo Abrenuncio. «Si alguna vez la rompiéramos podríamos fabricar el centauro».

“Mientras más transparente es la escritura, más se ve la poesía.”

Of Love and Other Demons
Variante: Cuanto más transparente es la escritura, más se ve la poesía.

“La memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos, y gracias a ese artificio, logramos sobrellevar el pasado.”

Love in the Time of Cholera
El amor en los tiempos del cólera (1985)
Variante: la memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos, y que gracias a ese artificio logramos sobrellevar el pasado.

“Ninguna persona merece tus lágrimas, y quien la merezca no te hará llorar.”

Variante: Ninguna persona que merece tus lagrimas. Y quien las merezcas no te hara llorar.

“No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad.”

Citas de sus libros, Del amor y otros demonios (1994)
Variante: No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad.

“Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.”

One Hundred Years of Solitude
Cien años de soledad (1967)
Variante: Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo

“las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra.”

Cien años de soledad
Variante: las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra

“Descubrí que no soy disciplinado por virtud, sino como reacción contra mi negligencia; que parezco generoso por encubrir mi mezquindad, que me paso de prudente por mal pensado, que soy conciliador para no sucumbir a mis cóleras reprimidas, que sólo soy puntual para que no se sepa cuan poco me importa el tiempo ajeno. Descubrí, en fin, que el amor no es un estado del alma sino un signo del zodiaco.”

Memoria de mis Putas Tristes)
Variante: Descubrí que no soy disciplinado por virtud, sino como reacción contra mi inteligencia; que parezco generoso por encubrir mi mezquindad, que me paso de prudente por mal pensado, que soy conciliador para no sucumbir a mis cóleras reprimidas, que sólo soy puntual para que no se sepa cual poco me importa el tiempo ajeno. Descubrí, en fin, que el amor no es un estado del alma sino un signo del zodiaco.