Frases sobre grito
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Filosofía y otros
Fuente: Discurso del Papa en su visita al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau, domingo 28 de mayo de 2006. https://w2.vatican.va/content/benedict-xvi/es/speeches/2006/may/documents/hf_ben-xvi_spe_20060528_auschwitz-birkenau.html

En algún lugar del Puerto (1965)
Textos de canciones, Víctor Jara [Canto a lo humano] (1966), Victor Jara (1967)
y aplaudía [...]»
The bad boy of music (memorias).

“Alonso es el mejor; Vettel es como un niño pequeño, siempre grita.”

Extracto de la canción “Horses” del álbum “Horses” 1975
Canciones
Sin fuentes
Un guardia civil, publicado en la tribuna del diario ABC.

Gol de Fabio Grosso en la final de la Copa Mundial de Fútbol 2006.

Segundo gol a Paraguay de Iván Zamorano, eliminatorias a Francia 98.
Fuente: YouTube.com http://www.youtube.com/watch?v=sYgOYchTLS4

“No me gustan los gritos y peleas, y no puedo pelear.”
“Todo Chile gritó por un gol mío». (Luego del partido vs. Colo-Colo en el Apertura 2011).”

“Yo no puedo callar cuando el corazón me da gritos.”
Fuente: Memorias del Subsuelo.

1894

“Lanzo mi grito mayor: Evangelio de esperanza a ritmo de tiempo nuevo! Esta es mi Patria! ECUADOR.”
Fuente: Rutas de Sombra y de Sol - pag 311, 22 de marzo de 2019, 2006, culturaenecuador.org, es http://www.culturaenecuador.org/images/stories/documentos/libros/rutasdesombraydesol.pdf,

Citas de Canciones

“Un grito jamás sustituirá a un argumento en esta sala.”
Tras la irrupción de una vecina en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid, durante el que se debatía la aprobación del Plan Parcial de la Cornisa de San Francisco.
Fuente: Diario El Mundo http://www.elmundo.es/elmundo/2009/02/27/madrid/1235731439.html
“La poesía es esta loca que grita. Todo parece poesía. Los locos miran alto. Todo parece locura.”

“¡Si no lo grito muero! ¿Te he dicho ya que te amo?”
De Canciones (Albumes), Rosso Relativo (Rojo Relativo)

“La paradoja - el grito imposible que emite lo inefable cuando lo llevas hasta el paroxismo.”

“¡Qué pasa neng!" es el grito mas escuchado después de "Lo siento, no eres mi tipo.”
atacando al hombre».
Fuente: [Galmés Cerezo], Damián. Guadalices: Novela por microfinturas. Editorial Pragmata, 2014. ISBN 9788897792857.
Fuente: Miserias de la Guerra.
Fuente: VV. AA. Las mejores frases y citas célebres. Editorial Plutón Ediciones X, S. L., 2017. ISBN 9788415089353.
Fuente: Las veleidades de la fortuna, Obras completas, Volumen 1. Editorial Biblioteca Nueva, 1946, página 1209.

Polémicas
Fuente: (D.F. Sarmiento; ‘Condición del extranjero en América’; en: “OBRAS DE SARMIENTO, publicadas bajo los auspicios del gobierno argentino”, tomo XXXVI. Editor A. Belin Sarmiento. Imprenta y Litografía “Mariano Moreno” – Bs. As., 1896 ) ( D.F. Sarmiento; ‘Condición del extranjero en América’; Obras completas, tomo XXXVI. Luz del Día, Bs. As., 1953 )( artículo titulado “Somos extranjeros”, en el Censor, Buenos Aires, 1886)
“A veces la gente es feísima y aún así te manda y te grita como si nada.”
Lo peor de todo

“El que grita estando colérico es tan patán como el que ríe a carcajadas.”

y "¡Viva la democracia!""
Días después del 23-F.

Llegar a la cima y seguir subiendo: El sexto camino [Versión Hispanoamericana]

La tregua
Variante: Hay que gritarle en el oído a la gente, ya que su aparente sordera es una especie de autodefensa, de cobarde y malsana autodefensa. Hay que lograr que se despierte en los demás la vergüenza de sí mismos, que se sustituya en ellos la autodefensa por el autoasco. El día en que el uruguayo sienta asco de su propia pasividad, ese día se convertirá en algo útil.

Wolves of the Calla

Alicia en el País de las Maravillas
La herida en la lengua
Shantaram

Cómo vivir juntos. Simulaciones novelescas de algunos espacios cotidianos. Notas de cursos y semenarios en el Collège de France, 1976-1977

“Todas las noches me moría cuando oía los gritos ahogados de mamá al recibir los golpes paternos.”
L'animal est une personne

Jesús entre otros dioses
Variante: Hay una manera mejor de pensar acerca de nuestras mentes: la Biblia nos manda a renovar nuestras mentes para pensar como Él piensa, no quitarlas quirúrgicamente (Romanos 12.1-2). Anímese al pensar que la Biblia está llena de personas que pensaban fuertemente. Algunos hasta debatieron con Dios, pero no les cayó un rayo encima, ni fueron castigados de otra manera: • Moisés se preguntó si Dios había tomado la decisión correcta al enviarlo a liberar los israelitas esclavos en Egipto (Éxodo 3.11). • Habacuc miró al mal descontrolado y al sufrimiento del mundo y le gritó a Dios: «¿Hasta cuándo?» (Habacuc 1.2). • Natanael abiertamente expresó su cansada opinión de las raíces de Jesús (Juan 1.46). • A Tomás le permitieron ver y tocar las heridas de Cristo para creer que había resucitado de los muertos (Juan 20.24-29). • Los habitantes de Berea dedicaron tiempo para probar con las Escrituras hasta la enseñanza del apóstol Pablo (Hechos 17.11). • No somos suficientemente inteligentes. Eso es absolutamente falso. Me doy cuenta de que todos estamos creados con diferentes habilidades. Pero no tenga miedo del material que parece estar muy por encima de su entendimiento. ¡Usted sí tiene la habilidad de luchar en él! No diga: «Esto es demasiado duro para mí». Cuando era más joven, ponerse en puntillas para llegar al envase de galletas no lo hacía a usted más alto. Tratar con ideas es asombrosamente diferente. Extender su entendimiento le hace mucho más alto, mucho más inteligente, para su próximo estirón espiritual.

Ante el dolor de los demás

Memoirs of a Dutiful Daughter
Variante: A menudo me he interrogado sobre la razón y el sentido de mis rabietas.
Creo que se explican en parte por una vitalidad fogosa y por un extremismo
al cual nunca he renunciado del todo. Llevaba mis repugnancias hasta el
vómito, mis deseos hasta la obsesión; un abismo separaba las cosas que me
gustaban de las que no me gustaban. No podía aceptar con indiferencia la
caída que me precipitaba de la plenitud al vacío, de la beatitud al horror;
si la consideraba fatal, me resignaba; nunca me enojé contra un objeto.
Pero me negaba a ceder a esa fuerza impalpable: las palabras; lo que me
sublevaba es que una frase lanzada al descuido: "Debes hacerlo... no debes
hacerlo", arruinara en un instante mis empresas y mis alegrías. Lo
arbitrario de las órdenes y de las prohibiciones contra las que chocaba
denunciaba su inconsistencia; ayer pelé un durazno: ¿por qué no esa
ciruela?, ¿por qué dejar mis juegos justo en este minuto? En todas partes
encontraba obligaciones, en ninguna parte su necesidad. En el corazón de la
ley que me abrumaba con el implacable rigor de las piedras, yo entreveía
una ausencia vertiginosa: me sumergía en ese abismo, la boca desgarrada por
gritos. Aferrándome al suelo, pataleando, oponía mi peso de carne al aéreo
poder que me tiranizaba; lo obligaba a materializarse; me encerraban en un
cuarto oscuro entre escobas y plumeros; entonces podía golpear con los pies
y las manos en muros verdaderos, en vez de debatirme contra inasibles
voluntades. Yo sabía que esa lucha era vana; desde el momento en que mamá
me había sacado de las manos la ciruela sangrienta, en que Louise había
guardado en su bolsa mi pala y mis moldes, yo estaba vencida; pero no me
rendía. Cumplía el trabajo de la derrota. Mis sobresaltos, las lágrimas que
me cegaban, quebraban el tiempo, borraban el espacio, abolían a la vez el
objeto de mi deseo y los obstáculos que me separaban de él. Me hundía en la
noche de la impotencia; ya nada quedaba salvo mi presencia desnuda y ella
explotaba en largos aullidos.
Amusing Ourselves to Death: Public Discourse in the Age of Show Business

Madwomen: The "Locas mujeres" Poems of Gabriela Mistral, a Bilingual Edition