Frases sobre el mal
página 5

Citas de personajes, Inodoro Pereyra
“A los buenos nadie los recuerda, a los malos nadie los olvida.”

Sin fuentes
Citas en sus obras, De El dolor paraguayo

Fuente: Citado en Sarú Toledo, Zulema. Parliament. Ediciones Escritores Argentinos de Hoy, 2005, p. 9

“La impaciencia es señal de ánimo vil y bajo, mal enseñado y peor acostumbrado.”
Sin fuentes

El Grito de Dolores, en la madrugada del 16 de septiembre de 1810, inició una revuelta que condujo a la Guerra de Independencia de México.
Citas de Hidalgo
“Los perros no piensan y distinguen enseguida a los malos de los buenos.”

“Hasta que te aceptas como eres, lo llevas mal. Una vez aceptado, lo llevas mejor.”
Fuente: Entrevista en "Qué tiempo tan feliz" (06/11/2011)

“El arte del gobernante consiste en hacer el bien personalmente y el mal por segunda mano.”

Entrevista con Lyn-Z de Mindless Self Indulgence (2008)
Notas:Sobre la agresividad entre las mujeres.
Verificadas
Fuente: Grandes Mentes Asesinas de la Historia. Anónimo. Edición íntegra. Libro Móvil, 2018. https://books.google.es/books?id=sSNWDwAAQBAJ&printsec=frontcover&dq=Grandes+Mentes+Asesinas+de+la+Historia&hl=es&sa=X&ved=0ahUKEwib8Mnn-9_hAhUOhxoKHQl7CEsQ6AEIKDAA#v=onepage&q=No%20me%20arrepiento%20de%20lo%20que%20he%20hecho%2C%20porque%20me%20gusta%20la%20carne%20y%20no%20soy%20el%20%C3%BAnico%2C%20en%20diciembre%20compart%C3%AD%20al%20vecino%20Manuel%20%E2%80%9Cpana&f=false En Google libros. Consultado el 21 de abril de 2019.

Fuente: [Alonso Montes], Ana. «Tres mosqueteros del periodismo.» https://www.elmundo.es/television/2014/09/25/5423491622601d820f8b4575.html El Mundo. Consultado el 11 de mayo de 2019.

“La derrota en la guerra no es el mayor de los males, salvo cuando la inflige un enemigo indigno.”
Sin fuentes

“Las malas noticias a menudo vienen en racimos. Algunas amargas; la mayoría, pésimas”
Lucrecia Borgia, la hija del Papa

The Terminal Man
Variante: Control de la mente. Vaya estupidez.
Lo cierto era que todo el mundo tenía la mente controlada, y todo el mundo se congratulaba por ello. Los controladores de mente más poderosos del mundo eran los padres, y eran ellos los que causaban más daños. Los teóricos solían olvidar que nadie nacía convencional, neurótico o con prejuicios; estas cualidades requerían ayuda ajena. Naturalmente, los padres no tenían intención de causar daño a sus hijos; se limitaban a inculcarles actitudes que consideraban importantes y útiles para ellos.
Los niños recién nacidos eran pequeños computadores en espera de ser programados. Podían aprender todo cuanto les fuera enseñado, desde mala ortografía a actitudes equivocadas. Como los computadores, no sabían discriminar; carecían de elementos para diferenciar las ideas buenas de las malas. La analogía era absolutamente exacta: mucha gente había comentado el infantilismo y la fidelidad literal de los computadores. Por ejemplo, si se ordenaba a un computador <>, el computadores respondería inmediatamente que no podía ponerse los calcetines por encima de los zapatos.
Toda la programación importante había terminado a la edad de siete años. Las actitudes raciales, sexuales, éticas, religiosas, nacionales. El giróscopo estaba en marcha, y los niños ya podían empezar su progreso por los cauces señalados de antemano.
Control de la mente.
¿Cómo llamar a algo tan sencillo como los convencionalismos sociales? ¿Estrecharse mutuamente las manos al saludarse? ¿No dar nunca la espalda en un ascensor? ¿Servir la comida por la izquierda? ¿Colocar la copa de vino a la derecha? Cientos de pequeños convencionalismos que la gente necesitaba para estereotipar las relaciones sociales; la supresión de una sola de ellas acarrearía una ansiedad insoportable.
Las personas necesitaban el control de la mente. Les gustaba sujetarse a él. Sin él se sentían irremediablemente perdidas.
Pero si un pequeño grupo de gente intentaba resolver el mayor problema del mundo en la actualidad –la violencia incontrolada-, de todas partes llegaban las exclamaciones: control de la mente, ¡control de la mente!
¿Qué era mejor, control o caos?

“¡No quiero morir todavía! ¡Aún me duele la cabeza, estaré de mal humor y no lo disfrutaré!”
The Hitchhiker's Guide to the Galaxy

“El mundo de ningún modo se hundirá porque haya menos hombres malos.”
Perpetual Peace

Nineteen Minutes
Variante: Aunque, pensándolo bien, tal vez las cosas malas suceden porque es la única forma de que sigamos recordando cómo deberían ser las buenas.

Yo Declaro: 31 Promesas Para Proclamar Sobre Su Vida

Memories of My Melancholy Whores
Variante: Gracias a ella me enfrenté por vez primera con mi ser natural mientras transcurrían mis 90 años. Descubrí que mi obsesión de que cada cosa estuviera en su puesto, cada asunto en su tiempo, cada palabra en su estilo, no era el premio merecido de una mente en orden, sino al contrario, todo un sistema de simulación inventado por mí para ocultar el desorden de mi naturaleza. Descubrí que no soy disciplinado por virtud sino como reacción contra mi negligencia; que parezco generoso por encubrir mi mezquindad que me paso de prudente por mal pensado, que soy conciliador por no sucumbir a mis cóleras reprimidas, que sólo soy puntual para que no se sepa cuán poco me importa el tiempo ajeno. Descubrí, en fin, que el amor no es un estado del alma sino un signo del zodiaco.

Sus ideas, Arthur Schopenhauer (Incluye los ensayos El amor, las mujeres y la muerte, Sobre la voluntad en la naturaleza y El mundo como voluntad y representación)
A Fairly Honourable Defeat
Loba

Variante: si bien algunos ceden ante las situaciones malas, no todo el mundo lo hace. Y que el trauma que puede destruir a una persona, también puede ser lo que proporcione a otro la capacidad de superar y construir un futuro mejor.
Nosotros no tenemos que ser o seguir siendo las víctimas de lo que la vida a veces nos depara. Con la suficiente fuerza y valor, todos podemos superar y aprender a prosperar a pesar de los horrores y tragedias a los que hemos sobrevivido.
Como dijo Platón: "Se amable, pues cada persona con la que te cruzas está lidiando su ardua batalla". Ese es el lema de mi vida y me ha acompañado a través de mi propio infierno y horas oscuras. Con la belleza y el poder del espíritu humano, porque se lo duro que puede llegar a ser ganar la batalla por la cordura y la seguridad. Y se lo difícil que es dejar atrás un pasado brutal que nunca debería haber existido.
Cada día es una nueva batalla y si bien es posible que pierda algunas de esas peleas, nunca perderé mi guerra. No podía controlar el pasado o algunas de las pesadillas que se me han impuesto, pero puedo y realmente controlo mi presente y no permitiré que esos buitres me arrebaten otro momento de mi vida.
Todos tenemos momentos de debilidad, pero con ello obtenemos la fuerza para saber que todavía seguimos aquí. Y que todavía importamos.
Todos nosotros.