Frases sobre toda
Una colección de frases y citas sobre el tema del toda.
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„Los habitantes de países más o menos ricos comemos al revés de como comió la enorme mayoría de la humanidad desde el principio de los tiempos. Es un cambio cultural radical, y no parece que lo notemos demasiado. Los hombres siempre comieron sobre todo hidratos de carbono y fibras vegetales; a veces, cada tanto, los acompañaban con un trocito de proteínas animales. Cada vez que comemos un bife con ensalada, una pata de pollo con arroz, una hamburguesa con puré, un choripán, estamos dando vuelta esa costumbre milenaria: poniendo el trozo de animal como centro al que acompañan esos hidratos o fibras vegetales.
Creo que no nos damos cuenta de la pompa que eso significa. Creo que cualquier indio, cualquier africano, muchos sudacas lo notarían enseguida. Porque, para la mayoría de los habitantes del OtroMundo, el sistema sigue siendo el mismo: el consumo mundial de alimentos parece muy variado, pero tres cuartos de la comida consumida en el planeta es arroz, trigo o maíz; solo el arroz es la mitad de la comida mundial.
Digo: la mitad de toda la comida que los 7.000 millones de humanos comemos cada día es arroz. (…) Comer carne es un alarde bestial de poder. La carne es la metáfora más perfecta de la desigualdad.“
— Martín Caparrós escritor y periodista argentino 1957
El hambre

„SOPAS, no hay nadie.. pero timbraron ¿sera el doctor Galán que vino a jalarle las patas a toda la clientela del edificio?“
— Jaime Garzón Humorista, presentador de televisión, y defensor de los Derechos Humanos Colombiano. 1960 - 1999

„Querer es esencialmente sufrir, y como vivir es querer, toda vida es por esencia dolor. Cuanto más elevado es el ser, más sufre… La vida del hombre no es más que una lucha por la existencia, con la certidumbre de resultar vencido. La vida es una cacería incesante, donde los seres, unas veces cazadores y otras, cazados, se disputan las piltrafas de una horrible presa. Es una historia natural del dolor, que se resume así: querer sin motivo, sufrir siempre, luchar de continuo, y después morir… Y así sucesivamente por los siglos, de los siglos hasta que nuestro planeta se haga trizas.“
— Arthur Schopenhauer filósofo alemán 1788 - 1860
Sin fuentes

„Necesito de toda mi inocencia, de toda mi maldad para sobrellevar mi desnudez ardiente.“
— Alejandra Pizarnik poeta argentina 1936 - 1972
Diarios: edición definitiva

„Lo hice nuevamente.
Uno de cada diez años
puedo soportarlo…
una especie de milagro ambulante, mi piel
brilla como una pantalla nazi,
mi pie derecho
un pisapapeles,
mi rostro sin forma, delgado
lienzo judío.
Retira la compresa,
¡ah, enemigo mío!
¿te doy miedo?…
¿La nariz, la fosa de los ojos, toda la dentadura?
El aliento agrio
un día se desvanecerá.
Pronto, pronto la carne
que alimentó la grave sepultura me será
familiar
y yo seré una mujer sonriente,
sólo tengo treinta.
Y como el gato tengo nueve vidas que morir.
Ésta es la Número Tres.
Qué basura
para la aniquilación de cada década.
Qué millón de filamentos.
La multitud como maní prensado
se atropella para ver
desenvuelven mis manos y pies…
el gran strip tease
señoras y señores
éstas son mis manos
mis rodillas.
Puede que esté piel y huesos,
sin embargo, soy la misma e idéntica mujer.
La primera vez que ocurrió, tenía diez.
Fue un accidente.
La segunda vez quise
que fuera definitivo y no regresar jamás.
Me mecí doblada sobre mí misma
como una concha.
Tuvieron que llamar y llamar
y quitarme uno a uno los gusanos como perlas viscosas.
Morir
es un arte, como cualquier otro,
yo lo hago de maravillas.
Hago que se sienta como un infierno.
Hago que se sienta real.
Creo que podrían llamarlo un don.
Es tan fácil que puedes hacerlo en una celda.
Es tan fácil que puedes hacerlo y quedarte ahí, quietita.
Es el teatral
regreso a pleno día
al mismo lugar, a la misma cara, al mismo grito
brutal y divertido
“¡Milagro!”
que me deja fuera de combate.
Hay un precio a pagar
para mirar las escaras, hay un precio a pagar
para auscultar mi corazón…
late de veras.
Y hay un precio a pagar, un precio mayor
por una palabra o un contacto
o un poquito de sangre
o una muestra de mi cabello o de mi ropa.
Bueno, bueno, Herr Doctor.
Bueno, Herr Enemigo.
Soy vuestra opus,
soy vuestra valiosa
niña de oro puro
que se funde en un chillido.
Giro y ardo.
No crean que no estimo su enorme preocupación.
Cenizas, cenizas…
Ustedes atizan y remueven.
Carne, hueso, no hay nada allí…
Un pan de jabón,
un anillo de bodas,
un empaste de oro.
Herr dios, Herr Lucifer
tengan cuidado
tengan cuidado.
Sobre las cenizas
me elevo con mi cabello rojo
y devoro hombres como aire.“
— Sylvia Plath escritora Estadounidense 1932 - 1963
Ariel
„Se levanta y hace la cama, luego recoge del suelo unos libros de bolsillo (novelas policíacas) y los pone en la librería. Tiene ropa que lavar antes de irse, ropa que guardar, medias que emparejar y meter en los cajones. Envuelve la basura en papel de periódico y baja tres pisos para dejarla en el cubo de la basura. Saca los calcetines de Cal de detrás de la cama y los sacude, dejándolos sobre la mesa de la cocina. Hay trapos que lavar, hollín en el alféizar de las ventanas, cacerolas en remojo por fregar, hay que poner un plato bajo el radiador por si funciona durante la semana (se sale). Oh. Aj. Que se queden las ventanas como están, aunque a Cal no le gusta verlas sucias. Esa espantosa tarea de restregar el retrete, pasarle el plumero a los muebles. Ropa para planchar. Siempre se caen cosas cuando recoges otras. Se agacha una y otra vez. La harina y el azúcar se derraman sobre los estantes que hay encima de la pila y tiene que pasar un paño; hay manchas y salpicaduras, hojas de rábano podridas, incrustaciones de hielo dentro de la vieja nevera (hay que mantener la puerta abierta con una silla, para que se descongele). Pedazos de papel, caramelos, cigarrillos y ceniza por toda la habitación. Tiene que quitarle el polvo a todo. Decide limpiar las ventanas a pesar de todo, porque quedan más bonitas. Estarán asquerosas después de una semana. Por supuesto, nadie la ayuda. Nada tiene la altura adecuada. Añade los calcetines de Cal a la ropa de ambos que tiene que llevar a la lavandería de autoservicio, hace un montón separado con la ropa de él que tiene que coser, y pone la mesa para sí misma. Raspa los restos de comida del plato del gato, y le pone agua limpia y leche. «Mr. Frosty» no parece andar por allí. Debajo de la pila encuentra un paño de cocina, lo recoge y lo cuelga sobre la pila, se recuerda a sí misma que tiene que limpiar allí abajo más tarde, y se sirve cereales, té, tostadas y zumo de naranja. (El zumo de naranja es un paquete del gobierno de naranja y pomelo en polvo y sabe a demonios.) Se levanta de un salto para buscar la fregona debajo de la pila, y el cubo, que también debe estar por allí. Es hora de fregar el suelo del cuarto de baño y el cuadrado de linóleo que hay delante de la pila y la cocina. Primero termina el té, deja la mitad del zumo de naranja y pomelo (haciendo una mueca) y algo del cereal. La leche vuelve a la nevera —no, espera un momento, tírala—, se sienta un minuto a escribir una lista de comestibles para comprarlos en el camino del autobús a casa, cuando vuelva dentro de una semana. Llena el cubo, encuentra el jabón, lo deja, friega sólo con agua. Lo guarda todo. Lava los platos del desayuno. Coge una novela policíaca y la hojea, sentada en el sofá. Se levanta, limpia la mesa, recoge la sal que ha caído en la alfombra y la barre. ¿Eso es todo? No, hay que arreglar la ropa de Cal y la suya. Oh, déjalo. Tiene que hacer la maleta y preparar la comida de Cal y la suya (aunque él no se marcha con ella). Eso significa volver a sacar las cosas de la nevera y volver a limpiar la mesa, dejar pisadas en el linóleo otra vez. Bueno, no importa. Lava el plato y el cuchillo. Ya está. Decide ir por la caja de costura para arreglar la ropa de él, cambia de opinión. Coge la novela policíaca. Cal dirá: «No has cosido mi ropa.» Va a coger la caja de costura del fondo del armario, pisando maletas, cajas, la tabla de plancha, su abrigo y ropa de invierno. Pequeñas manos salen de la espalda de Jeannine y recogen lo que ella tira. Se sienta en el sofá y arregla el desgarrón de la chaqueta de verano de él, cortando el hilo con los dientes. Vas a estropearte el esmalte. Botones. Zurce tres calcetines. (Los otros están bien.) Se frota los riñones. Cose el forro de una falda que está descosido. Limpia zapatos. Hace una pausa y mira sin ver. Luego reacciona y con aire de extraordinaria energía saca la maleta mediana del armario y empieza a meter su ropa para“
— Joanna Russ, libro El hombre hembra
The Female Man
„Soy el hombre de la libertad, esa es toda la fortuna que tengo.“
— Jim Morrison cantante, compositor y poeta estadounidense 1943 - 1971

„La miré. Todo el cielo y toda la tierra corrían por aquellos ojos.“
— Charles Bukowski escritor y poeta estadounidense 1920 - 1994
La máquina de follar y otros cuentos

„¡Primer amor!… Noble orgullo de sentirnos amados: sacrificio dulce de todo lo que antes nos era caro a favor de la mujer querida: felicidad que comprada para un día con las lágrimas de toda una existencia, recibiríamos como un don de Dios; perfume para todas las horas del porvenir; luz inextinguible del pasado; flor guardada en el alma y que no es dado marchitar a los desengaños; único tesoro que no puede arrebatarnos la envidia de los hombres; delirio delicioso… inspiración del cielo… ¡María! ¡María! ¡Cuánto te amé! ¡Cuánto te amara!“
— Jorge Isaacs, libro María
María
Variante: ¡Primer amor! Noble orgullo de sentirse amado; sacrificio dulce de todo lo que antes nos era caro a favor de la mujer querida; felicidad que, comprada
para un día con las lágrimas de toda una existencia, recibiríamos como un don de Dios; perfume para todas las
horas del porvenir: flor guardada en el alma que no es dado marchitar a los desengaños: único tesoro que no puede
arrebatarnos la envidia de los hombres, delirio delicioso..., inspiración del Cielo...¡María!¡María! ¡Cuánto te amé!¡Cuánto te amara!

„DÍA A DÍA
Decir que el tiempo es río es decir nada,
ni nace ni termina su corriente,
fluye desde horizontes infinitos
y seguirá, sin duda, hasta el olvido,
nacer nadie lo vio, ni le verá acabar,
en él flotamos por confusos trechos,
el tiempo de surgir y sumergirse
es el de nuestra vida, tan pequeña,
tan torpe, tan voraz, tan impaciente
que apenas nace y a morir empieza.
Feliz llamaban los antiguos vates
al que joven moría, eran los dioses
los que daban el don de no ir más lejos.
El fin siempre es temprano, cada día
es toda la vida en tiempo pleno,
no hay más que el hoy,
que este momento solo
en que conozco que estoy vivo y siento.
Cada día es el día y cada hora
es la única hora de la vida,
todo el ayer se fue en reminiscencia
y el mañana no existe todavía.
No llegamos a viejos, sólo somos
en la invariable vaguedad del ser,
los nombres son equívocos, las fechas
hacen inerte cuenta sin sentido,
no somos el de ayer ni el de mañana,
somos el de hoy apenas,
la vida empieza en cada amanecida
y la conciencia muere en cada noche.
Yo podría contar la historia vana
de una vida que acaso fue la mía,
pero que es tan ajena y tan extraña
ante esta hora en que me nombro y busco.
No se es viejo ni joven, se está vivo
y soy yo, el de hoy, quien hace el mundo
con mi mano segura o temblorosa,
con la errada visión que siempre tuve,
jugando el juego
de ausencias y presencias
que sólo para mí tiene sentido.
Todo está en ti, día que amaneces,
toda mi vida en mí sin sobra y falta,
como fue en cada hora ya contada,
como será en un siempre día a día.“
— Arturo Uslar Pietri escritor y político venezolano 1906 - 2001
El hombre que voy siendo

„Gustavo Cerati es un chetito, con toda la guita de papi…“
— Luca Prodan músico italiano 1953 - 1987

„Tenía frio y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua; pedía libros, es decir horizontes, es decir escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural del cuerpo por hambre sed o frío dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida“
— Federico García Lorca poeta, dramaturgo y prosista español 1898 - 1936

„Sólo existe el amor. Las otras cosas nobles apenas sirven para dignificarlo…. Algunos hombres jamas lo encuentran. Para otros es apenas una estrella fugaz que ilumina un año, un mes, una semana o un día en sus vidas. Pero ese destello efímero da significado a la existencia toda. Bienaventurado el que puede sentir en su carne y en su espíritu el fuego de esa chispa“
— Alejandro Dolina Escritor, locutor y actor argentino 1944

„El hombre de fe, el "creyente" de toda especie es, por necesidad, un hombre dependiente,…“
— Friedrich Nietzsche, libro El Anticristo
El Anticristo, maldición sobre el cristianismo (1888)
Fuente: LIV
„Yo haré que Venezuela sea la primera nación de toda Latinoamérica. La más grande, la más próspera y la más culta… Yo haré que se cumplan los pensamientos del Libertador Simón Bolívar. “Cesarán los partidos y se consolidará la unión, la Moral y Luces, son nuestras primeras necesidades.“
— Marcos Pérez Jiménez Militar y Presidente de Venezuela 1914 - 2001

„El imperialismo es un sistema de explotación que se produce no solo en la forma brutal de quienes vienen con armas para conquistar el territorio. El imperialismo a menudo ocurre en formas más sutiles, un préstamo, ayuda alimentaria, chantaje. Estamos luchando contra este sistema que permite que un puñado de hombres en la Tierra gobierne a toda la humanidad.“
— Thomas Sankara Presidente del Alto Volta 1949 - 1987