Frases sobre mirar
página 3

Camilo José Cela Foto
Théophile Gautier Foto
Patrick Rothfuss Foto

“¿Qué ha sido esa vergonzosa exhibición? —me preguntó Wilem cuando Marea se hubo marchado.
—¿Cómo dices?
—¿Cómo dices? —repitió imitando mi tono de voz—. ¿Cómo te atreves a fingir siquiera que eres tan imbécil? Si una chica tan guapa como esa me mirara con un solo ojo de la forma en que te ha mirado a ti con los dos… Ya habríamos encontrado una habitación, por expresarlo de forma educada.
—Ha sido simpática —protesté—. Y hemos hablado un rato. Me ha preguntado si querría enseñarle algunos acordes de arpa, pero hace mucho tiempo que no toco el arpa.
—Pues si sigues pasando por alto insinuaciones como esa, seguirás sin tocarla mucho tiempo —repuso Wilem con franqueza—. Lo único que ha faltado ha sido que se desabrochara otro botón.
Sim se inclinó hacia mí y apoyó una mano en mi hombro; era la viva imagen del amigo preocupado.
—Kvothe, hace tiempo que quiero hablar contigo de este problema. Si de verdad no te has dado cuenta de que esa chica se interesaba por ti, quizá tengas que admitir la posibilidad de que seas absolutamente inepto en lo relativo a las mujeres. Quizá debas plantearte el sacerdocio.
—Estáis borrachos —dije para disimular mi rubor—. ¿Os habéis quedado con que es la hija de un concejal?
—¿Te has quedado —replicó Wil en el mismo tono— con cómo te miraba?
Yo sabía que era deplorablemente inexperto con las mujeres, pero no tenía por qué reconocerlo. Así que descarté sus comentarios con un ademán y bajé del taburete.
—No sé, pero dudo que un revolcón detrás de la barra fuera en lo que estaba pensando esa chica. —Bebí un sorbo de agua y me alisé la capa—. Bueno, tengo que encontrar a mi Aloine y darle las gracias. ¿Qué aspecto tengo?
—¿Qué más da? —dijo Wilem.
Simmon le tocó el codo a Wilem.
—¿No lo ves? Va detrás de una presa más peligrosa que la escotada hija de un concejal.”

The Name of the Wind

Paulo Coelho Foto
Elizabeth Gilbert Foto
Carmen Laforet Foto
Antonio Gala Foto
Fernando Aramburu Foto
Mario Benedetti Foto
Irvine Welsh Foto
Bernhard Schlink Foto
Cesare Pavese Foto
Terry Pratchett Foto
Allan Kardec Foto
Julia Navarro Foto
Chuck Palahniuk Foto
Julio Cortázar Foto
David Foster Wallace Foto
Susanna Tamaro Foto
Zbigniew Herbert Foto
Antonio Muñoz Molina Foto
Jonathan Lethem Foto
Simone de Beauvoir Foto
Steve Biddulph Foto
Alessandro Baricco Foto
Federico García Lorca Foto

“Y aunque no me quisieras te querría por tu mirar sombrío como quiere la alondra al nuevo día, sólo por el rocío.”

Federico García Lorca (1898–1936) poeta, dramaturgo y prosista español

Libro de poemas

Aldous Huxley Foto
Susan Sontag Foto
Andrzej Sapkowski Foto
Cormac McCarthy Foto
Pablo Neruda Foto
Haruki Murakami Foto
Jack Canfield Foto

“No se puede cruzar el océano limitándose a mirar el agua. RABINDRANATH TAGORE”

Jack Canfield (1944) Spanish writer

Los Principios del Exito: Como Llegar de Donde Esta a Donde Quiere Ir

Trudi Canavan Foto
Idries Shah Foto
Rachel Cohn Foto
Thomas Bernhard Foto
Paulo Coelho Foto
Yann Martel Foto
Julio Cortázar Foto
Jorge Luis Borges Foto
Mario Benedetti Foto
Haruki Murakami Foto
Élmer Mendoza Foto
Jorge Luis Borges Foto
Camilo José Cela Foto
Terry Pratchett Foto
Stephen King Foto
Noam Chomsky Foto
Paulo Coelho Foto
Walt Whitman Foto
Jorge Luis Borges Foto
Thomas Brussig Foto
Eduardo Sacheri Foto
Julio Cortázar Foto
David Nicholls Foto

“A veces uno es consciente de cuándo están produciéndose los grandes momentos de su vida y a veces los descubre al mirar el pasado. Tal vez suceda lo mismo con las personas.” James Salter, Quemar los días”

David Nicholls (1966) escritor británico

Siempre el mismo día
Variante: «A veces uno es consciente de cuándo están produciéndose los grandes momentos de su vida y a veces los descubre al mirar el pasado. Tal vez suceda lo mismo con las personas.»

Paulo Coelho Foto
Khaled Hosseini Foto
Orhan Pamuk Foto
Ernesto Cardenal Foto

“Ileana: la Galaxia de Andrómeda, a 700 000 años luz, que se puede mirar a simple vista en una noche clara, está más cerca que tú. Otros ojos solitarios estarán mirándome desde Andrómeda, en la noche de ellos. Yo a ti no te veo. Ileana: la distancia es tiempo, y el tiempo vuela. A 200 millones de millas por hora el universo se está expandiendo hacia la Nada. Y tú estás lejos de mí como a millones de años.”

Ernesto Cardenal (1925) político y sacerdote nicaragüense

Vida perdida. Memorias, I: 1
Variante: Ileana: la Galaxia de Andrómeda, a 700 000 años luz, que se puede mirar a simple vista en una noche clara, está más cerca que tú. Otros ojos solitarios estarán mirándome desde Andrómeda, en la noche de ellos. Yo a ti no te veo. Ileana: la distancia es tiempo, y el tiempo vuela. A 200 millones de millas por hora el universo se está expandiendo hacia la Nada.

Isabel Allende Foto
Patrick Rothfuss Foto
Mario Benedetti Foto
Camilo José Cela Foto
Christopher Moore Foto
Camilo José Cela Foto

“La idea de la muerte llega siempre con paso de lobo, con andares de
culebra, como todas las peores imaginaciones. Nunca de repente llegan
las ideas que nos trastornan; lo repentino ahoga unos momentos, pero
nos deja, al marchar, largos años de vida por delante. Los pensamientos
que nos enloquecen con la peor de las locuras, la de la tristeza, siempre
llegan poco a poco y como sin sentir, como sin sentir invade la niebla los
campos, o la tisis los pechos. Avanza, fatal, incansable, pero lenta,
despaciosa, regular como el pulso. Hoy no la notamos; a lo mejor
mañana tampoco, ni pasado mañana, ni en un mes entero. Pero pasa ese
mes y empezamos a sentir amarga la comida, como doloroso el
recordar, ya estamos picados. Al correr de los días y las noches nos
vamos volviendo huraños, solitarios; en nuestra cabeza se cuecen las
ideas, las ideas que han de ocasionar el que nos corten la cabeza donde
se cocieron, quién sabe si para que no siga trabajando tan atrozmente.
Pasamos a lo mejor hasta semanas enteras sin variar; los que nos
rodean se acostumbraron ya a nuestra adustez y ya ni extrañan siquiera
nuestro extraño ser. Pero un día el mal crece, como los árboles, y
engorda, y ya no saludamos a la gente; y vuelven a sentirnos como raros
y como enamorados. Vamos enflaqueciendo, enflaqueciendo, y nuestra
barba hirsuta es cada vez más lacia. Empezamos a sentir el odio que nos
mata; ya no aguantamos el mirar; nos duele la conciencia, pero ¡no
importa!, ¡más vale que duela! Nos escuecen los ojos, que se llenan de
agua venenosa cuando miramos fuerte. El enemigo nota nuestro anhelo,
pero está confiado; el instinto no miente. (…) Cuando huimos como las
corzas, cuando el oído sobresalta nuestros sueños, estamos ya minados
por el mal; ya no hay solución, ya no hay arreglo posible. Empezamos a
caer, vertiginosamente ya, para no volvernos a levantar de vida. Quizás
para levantarnos un poco a última hora, antes de caer de cabeza hasta
el infierno… Mala cosa.”

The Family of Pascual Duarte

Francis Scott Fitzgerald Foto
Philip Kerr Foto
Rosa Montero Foto
Mario Benedetti Foto
Federico García Lorca Foto
Stefan Zweig Foto
Arturo Uslar Pietri Foto
Khaled Hosseini Foto
Stephen Chbosky Foto
Roberto Alifano Foto
Woody Allen Foto
Paulo Coelho Foto
Haruki Murakami Foto
Arturo Pérez-Reverte Foto
Donna Tartt Foto
John Katzenbach Foto
Emily Brontë Foto
Roberto Alifano Foto