
“Martin: "Boca necesita un tecnico que se plante a los jugadores.”
“Martin: "Boca necesita un tecnico que se plante a los jugadores.”
junio de 1999
“Mi nombre va de boca en boca mi cuerpo va de bar en bar en busca de una loca con quien hablar”
“Bill Clinton, el autor del refrán "Por la boca muere el pez… el pez gordo".”
“Soy una firme creyente en poner tu dinero donde está tu boca.”
“Puedo decir que nací con una llave inglesa en la boca.”
“Hoy dejas de saber que es. Vas sumergiendo tu boca en la pared. Y en vez de nadar, beber.”
Fuente: 1A (Cápsula Discos, 2004), L. Quinteros - En vez de nadar, beber.
Fuente: Cómo hacer radio y no morir en el intento, Libro editado por Biblioteca Inca Garcilaso de la Vega, Caracas, enero de 2003
“Mis 27 años entrenando me han permitido saber que no hay como abrir la boca para que te la partan.”
Fuente: Blog "Queremos un blog de Lillo" http://www.queremosunblogdelillo.blogspot.com/
Variante: En valenciano «Alguns professors, eixos que diuen aleshores, gairebé, no sé què vol dir, però són uns gilipolles».
Fuente: Vídeo en YouTube http://www.youtube.com/watch?v=m0Kr1h8bmgg
Citas de Pablo Castellano
Fuente: Entrevista en TVE1, 1999.
“Yo no quiero cobardes que me hagan sufrir, mejor le digo adiós a tu boca de anís”
- Te dejo Madrid - Disco: Laundry service
Letras de canciones
“Es como una explosión de sangre caliente y pus en la boca.”
Tras haber comido un ojo de buey
“La vida es algo que hay que morder y en cada boca tiene un sabor.”
Entrevista en Imagen de Radio (1990)
Verificadas
“La lógica por fin se nos deshizo en la boca.”
Naturaleza sangre
“Está escrito: ‘No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios’.”
Nacidos para correr: La historia de una tribu oculta, un grupo de superatletas y la mayor carrera de la historia
The Shining
Variante: En el aire transparente parecía que la imaginación se llenara de vida, escapara de las riendas de la razón, y mirar no era poder dejar de verse cayendo al vacío, mientras el cielo y las montañas cambiaban de lugar en un girar lento, mientras el grito le salía a uno de la boca como un globo ocioso, mientras el pelo y las faldas flotaban al viento.
“He dormido contigo
y al despertar tu boca
salida de tu sueño
me dio el sabor de tierra,
de agua”
100 Love Sonnets
You Don't Have to Say You Love Me
“(…) mido apenas los ojos más extensos del cielo y me inclino a tu boca para besar la tierra”
Veinte poemas de amor y una canción desesperada / Los versos del capitán
Me llaman Artemio Furia
Nacidos para correr: La historia de una tribu oculta, un grupo de superatletas y la mayor carrera de la historia
Memoirs of a Dutiful Daughter
Variante: A menudo me he interrogado sobre la razón y el sentido de mis rabietas.
Creo que se explican en parte por una vitalidad fogosa y por un extremismo
al cual nunca he renunciado del todo. Llevaba mis repugnancias hasta el
vómito, mis deseos hasta la obsesión; un abismo separaba las cosas que me
gustaban de las que no me gustaban. No podía aceptar con indiferencia la
caída que me precipitaba de la plenitud al vacío, de la beatitud al horror;
si la consideraba fatal, me resignaba; nunca me enojé contra un objeto.
Pero me negaba a ceder a esa fuerza impalpable: las palabras; lo que me
sublevaba es que una frase lanzada al descuido: "Debes hacerlo... no debes
hacerlo", arruinara en un instante mis empresas y mis alegrías. Lo
arbitrario de las órdenes y de las prohibiciones contra las que chocaba
denunciaba su inconsistencia; ayer pelé un durazno: ¿por qué no esa
ciruela?, ¿por qué dejar mis juegos justo en este minuto? En todas partes
encontraba obligaciones, en ninguna parte su necesidad. En el corazón de la
ley que me abrumaba con el implacable rigor de las piedras, yo entreveía
una ausencia vertiginosa: me sumergía en ese abismo, la boca desgarrada por
gritos. Aferrándome al suelo, pataleando, oponía mi peso de carne al aéreo
poder que me tiranizaba; lo obligaba a materializarse; me encerraban en un
cuarto oscuro entre escobas y plumeros; entonces podía golpear con los pies
y las manos en muros verdaderos, en vez de debatirme contra inasibles
voluntades. Yo sabía que esa lucha era vana; desde el momento en que mamá
me había sacado de las manos la ciruela sangrienta, en que Louise había
guardado en su bolsa mi pala y mis moldes, yo estaba vencida; pero no me
rendía. Cumplía el trabajo de la derrota. Mis sobresaltos, las lágrimas que
me cegaban, quebraban el tiempo, borraban el espacio, abolían a la vez el
objeto de mi deseo y los obstáculos que me separaban de él. Me hundía en la
noche de la impotencia; ya nada quedaba salvo mi presencia desnuda y ella
explotaba en largos aullidos.
The Gunslinger
Lo que está en mi corazón
“Hablar es tener demasiada consideración por los demás. Por la boca mueren los peces y Oscar Wilde.”
Plural de nadie: Aforismos
El arte de conducir bajo la lluvia
Indias blancas
On the Jellicoe Road
Pedro Páramo
Variante: Hace calof aquí- dije.
-Si, y esto no es nada- me contestó el otro.
Cálmese.
Ya lo sentirá mas fuerte cuando lleguemos a Comala. Aquello está sobre las brasas de la tierra, en la mera boca del infierno.
Con decirle que muchos de los que allí se mueren, al llegar al infierno regresan por su cobija.