Frases sobre habla
página 6

Walter Isaacson Foto
Elena Poniatowska Foto
Jorge Bucay Foto
Patrick Rothfuss Foto
Michel Houellebecq Foto

“Abuelo, ¿crees que volverás a estar junto a ella algún día?
—Sakutarô, cuando hablas de volver a estar juntos, ¿piensas en formas humanas?
No respondí.
—Si creemos que lo único que existe es lo que podemos ver, lo que tiene forma, nuestra existencia es muy pobre, ¿no te parece? —dijo mi abuelo—. No creo que la persona que yo amaba vuelva a aparecer ante mis ojos con la forma que yo conocía. Pero, si te olvidas de la forma, puedo decirte que ella y yo hemos estado juntos siempre. A lo largo de estos cincuenta años, no ha habido un solo instante en que no hayamos estado juntos.
—¿Y eso no es algo que tú te crees?
—Pues claro que sí. ¿Y qué hay de malo en estar convencido de algo? ¿Qué son las ciencias sino un montón de creencias? Cualquier cosa que piense un hombre utilizando su cabeza no puede ser más que una creencia. La cuestión es lo violenta o fuerte que esta creencia pueda llegar a ser. Un científico utiliza el telescopio o el microscopio para demostrar lo que cree. Nosotros no somos científicos, así que supongo que podemos usar otras cosas. Como, por ejemplo, el amor.
—¿Y de qué estabas hablando ahora?
—De amor. Amor. ¿Sabes lo que es?
—Sí, lo sé. Pero, cuando tú hablas de amor, parece otra cosa.
—Eso es porque el amor del que yo hablo y lo que se suele entender por amor son dos cosas que se parecen, pero que, en realidad, son de distinta naturaleza.”

Kyōichi Katayama (1959) escritor japonés

Socrates In Love

Mario Benedetti Foto
David Herbert Lawrence Foto
Anne Perry Foto
Franz Kafka Foto
Geoffrey Chaucer Foto
Gabrielle Zevin Foto
J. M. Coetzee Foto
Aldous Huxley Foto
Patrick Rothfuss Foto
Laura Esquivel Foto
Miloš Forman Foto

“Pero cuando se habla, no se mira. Los charlatanes nunca ven nada.”

Miloš Forman (1932–2018) cineasta checoslovaco

Los Fantasmas de Goya

Carlos Ruiz Zafón Foto

“Hay aquí un individuo que, si hablo, me robaría los pensamientos.”

Los renglones torcidos de Dios

Arturo Pérez-Reverte Foto
Juan Gabriel Vásquez Foto
Stefanie Zweig Foto
William Saroyan Foto
Philip K. Dick Foto
Henry Drummond Foto
Allan Kardec Foto
Jean Jacques Rousseau Foto

“Hasta entonces me había hablado de mí solo, como a un niño; desde aquel momento empezó a tratarme como a un hombre, y me habló de sí misma. Me”

Jean Jacques Rousseau (1712–1778) escritor, filósofo y músico franco-helvético definido como un ilustrado

LAS CONFESIONES

Anaïs Nin Foto
Italo Calvino Foto
Arthur Conan Doyle Foto
Cormac McCarthy Foto
Ray Bradbury Foto
Paulo Coelho Foto
Jonathan Coe Foto
Ovidio Foto
Victor Hugo Foto

“Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no escucha.”

Victor Hugo (1802–1885) poeta, novelista y dramaturgo francés

Fuente: [Palomo Triguero] (2013), p. 209.

Luis Pescetti Foto

“Lo que veo es que cada vez hablás peor, repetiste mil veces las mismas palabras.”

Luis Pescetti (1958) músico y escritor argentino

Natacha

Steve Martin Foto
Sherrilyn Kenyon Foto
Cormac McCarthy Foto
Gabriel García Márquez Foto
Pablo Neruda Foto
Robert Kiyosaki Foto
Carlos Ruiz Zafón Foto
Gabriel García Márquez Foto
Carl Sagan Foto
Alejandra Pizarnik Foto

“hablas para no verme”

Alejandra Pizarnik (1936–1972) poeta argentina
Mario Benedetti Foto
Haruki Murakami Foto
Platón Foto
Philippe Claudel Foto
Idries Shah Foto
Cecelia Ahern Foto
Michel De Montaigne Foto

“En cuanto al fin que nos proponen Plinio y Cicerón, la gloria, estoy muy lejos de tenerla en cuenta. La inclinación más contraria al retiro es la ambición. La gloria y el reposo no pueden alojarse en el mismo albergue. Por lo que veo, estos sólo tienen los brazos y las piernas fuera de la multitud; su alma y su intención continúan, más que nunca, atadas a ella: b | Tun’ uetule auriculis alienis colligis escas? [Entonces, viejo, ¿trabajas sólo para alimentar los oídos ajenos? ] a | Se han echado atrás solo para saltar mejor, y para, con un movimiento más fuerte, penetrar más vivamente en la muchedumbre. ¿Queréis ver cómo se quedan cortos por un pelo?
Comparemos las opiniones de dos filósofos [Epicuro y Séneca], y de dos escuelas muy diferentes, uno escribiendo a Idomeneo, otro a Lucillo, amigos suyos, para apartarlos de la administración de los negocios y de las grandezas, y dirigirlos hacia la soledad. Hasta ahora has vivido —dicen— nadando y flotando; ven a morir al puerto. Has entregado el resto de tu vida a la luz, entrega esta parte a la sombra. Es imposible abandonar las tareas si no renuncias a su fruto; así pues, deshazte de toda preocupación por el nombre y por la gloria. Existe el peligro de que el brillo de tus acciones pasadas te ilumine en exceso, y te siga hasta el interior de tu guarida. Abandona, junto a los demás placeres, el que brinda la aprobación ajena; y, en cuanto a tu ciencia y capacidad, no te importe: no perderán su eficacia porque tú valgas más que ellas. Acuérdate de aquel que, cuando le preguntaron para qué se esforzaba tanto en un arte que no podía ser conocido por mucha gente, respondió: «Me basta con pocos, me basta con uno, me basta con ninguno». Tenía razón. Tú y un compañero sois teatro de sobra suficiente el uno para el otro, o tú para ti mismo. Que el pueblo sea para ti uno solo, y que uno solo sea para ti todo el pueblo. Es una ambición cobarde pretender obtener gloria de la ociosidad y del ocultamiento. Tenemos que hacer como los animales, que borran su rastro a la entrada de su guarida. No has de buscar más que el mundo hable de ti, sino cómo has de hablarte a ti mismo. Retírate en tu interior, pero primero prepárate para acogerte; sería una locura confiarte a ti mismo si no te sabes gobernar. Uno puede equivocarse tanto en la soledad como en la compañía. Hasta que no te hayas vuelto tal que no oses tropezar ante ti, y hasta que no sientas vergüenza y respeto por ti mismo, c | obuersentur species honestae animo [que se ofrezcan imágenes honestas al espíritu], a | represéntate siempre en la imaginación a Catón, Foción y Aristides, ante los cuales aun los locos ocultarían sus faltas, y establécelos como censores de todas tus intenciones. Si estas se desvían, la reverencia por ellos te devolverá al camino. Te retendrán en la vía de contentarte contigo mismo, de no tomar nada en préstamo sino de ti, de detener y fijar el alma en unos pensamientos definidos y limitados donde pueda complacerse; y, tras haber entendido los verdaderos bienes, que se gozan a medida que se entienden, de contentarse con ellos, sin ansias de prolongar la vida ni el nombre. Este es el consejo de la verdadera y genuina filosofía, no de una filosofía ostentosa y verbal, como es la de los dos primeros.”

Michel De Montaigne (1533–1592) biografía, filósofo y político francés del Renacimiento

The Complete Essays

Henry Miller Foto
Ermilo Abreu Gómez Foto
Cornelia Funke Foto
Stanisław Lem Foto
Milan Kundera Foto
Barbara Ehrenreich Foto
Antonio Skármeta Foto
Eduardo Sacheri Foto
Alexandre Dumas (padre) Foto
Platón Foto
Paulo Coelho Foto
Arturo Uslar Pietri Foto
Milan Kundera Foto
Ray Loriga Foto
Thomas Hardy Foto
Antonio Tabucchi Foto
Julio Cortázar Foto
Stanisław Lem Foto
Idries Shah Foto

“Rumi habla de las personas que se fían tanto de la palabra escrita como si a veces fueran no más que asnos cargados de libros.”

Idries Shah (1924–1996)

Learning How to Learn: Psychology and Spirituality in the Sufi Way

Ken Robinson Foto
Michel Foucault Foto
Arturo Pérez-Reverte Foto
Mario Benedetti Foto
Oscar Wilde Foto
Virginie Despentes Foto
Terry Pratchett Foto

“Nunca hablo con gente que apunta cosas. Norma militar.”

Terry Pratchett (1948–2015) escritor británico de fantasía y ciencia ficción

Regimiento Monstruoso

Chuck Palahniuk Foto
Douglas Adams Foto
Arturo Uslar Pietri Foto
Mario Benedetti Foto
Cassandra Clare Foto
Paulo Coelho Foto
Jean Jacques Rousseau Foto
Paulo Coelho Foto
Marguerite Duras Foto
Idries Shah Foto
André Maurois Foto

“La lectura de un libro es un diálogo incesante, en el que el libro habla y el alma contesta.”

André Maurois (1885–1967) escritor francés

Fuente: [Ortega Blake] (2013), p. 2405.