Frases sobre tan
página 2

Tomás Moro Foto
Federico Moura Foto
Francisco de Miranda Foto
Ernesto Sabato Foto

“La vida es tan corta y el oficio de vivir tan difícil, que cuando uno empieza a aprenderlo, ya hay que morirse.”

Ernesto Sabato (1911–2011) escritor argentino

Sobre Héroes y Tumbas, 1961)

Lana del Rey Foto
Arturo Jauretche Foto
Pablo Hasél Foto
Facundo Cabral Foto
Stephen King Foto
Arturo Uslar Pietri Foto

“DÍA A DÍA

Decir que el tiempo es río es decir nada,
ni nace ni termina su corriente,
fluye desde horizontes infinitos
y seguirá, sin duda, hasta el olvido,
nacer nadie lo vio, ni le verá acabar,
en él flotamos por confusos trechos,
el tiempo de surgir y sumergirse
es el de nuestra vida, tan pequeña,
tan torpe, tan voraz, tan impaciente
que apenas nace y a morir empieza.


Feliz llamaban los antiguos vates
al que joven moría, eran los dioses
los que daban el don de no ir más lejos.
El fin siempre es temprano, cada día
es toda la vida en tiempo pleno,
no hay más que el hoy,
que este momento solo
en que conozco que estoy vivo y siento.

Cada día es el día y cada hora
es la única hora de la vida,
todo el ayer se fue en reminiscencia
y el mañana no existe todavía.

No llegamos a viejos, sólo somos
en la invariable vaguedad del ser,
los nombres son equívocos, las fechas
hacen inerte cuenta sin sentido,
no somos el de ayer ni el de mañana,
somos el de hoy apenas,
la vida empieza en cada amanecida
y la conciencia muere en cada noche.

Yo podría contar la historia vana
de una vida que acaso fue la mía,
pero que es tan ajena y tan extraña
ante esta hora en que me nombro y busco.

No se es viejo ni joven, se está vivo
y soy yo, el de hoy, quien hace el mundo
con mi mano segura o temblorosa,
con la errada visión que siempre tuve,
jugando el juego
de ausencias y presencias
que sólo para mí tiene sentido.

Todo está en ti, día que amaneces,
toda mi vida en mí sin sobra y falta,
como fue en cada hora ya contada,
como será en un siempre día a día.”

Arturo Uslar Pietri (1906–2001) escritor y político venezolano

El hombre que voy siendo

Adolf Hitler Foto

“Siguiendo el ejemplo de Francia, se podría restringir artificialmente la natalidad y de este modo evitar una superpoblación. La Naturaleza misma suele oponerse al aumento de población en determinados países o en ciertas razas, y esto en épocas de hambre o por condiciones climáticas desfavorables, así como tratándose de la escasa fertilidad del suelo. Por cierto que la Naturaleza obra aquí sabiamente y sin contemplaciones; no anula propiamente la capacidad de procreación, pero sí se opone ala conservación de la prole al someter a ésta a rigurosas pruebas y privaciones tan arduas, que todo el que no es fuerte y sano vuelve al seno de lo desconocido. El que entonces sobrevive, a pesar de los rigores de la lucha por la existencia, resulta mil veces experimentado, fuerte y apto para seguir generando, de tal suerte que el proceso de la selección puede empezar de nuevo. Actuando de ese modo brutal contra el individuo y llamándolo de nuevo momentáneamente a desaparecer, por no ser capaz de resistir la tempestad de la vida, la Naturaleza mantiene la Raza, la propia especie vigorosa y la hace capaz de las mayores realizaciones. La disminución del número implica así la vigorización del individuo y con ello, finalmente, la consolidación de la Raza. Otra cosa es que el hombre, por sí mismo, se empeñe en restringir su descendencia. Aquí es preciso considerar no sólo el factor natural, sino también el humano. El hombre cree saber más que esa cruel Reina de toda la sabiduría, la Naturaleza. Él no limita la conservación del individuo, sino la propia reproducción. Eso le parece a él (que siempre se ve a sí mismo y nunca a la Raza) más humano y más justificado que lo otro. Infelizmente, las consecuencias son también inversas. En cuanto a la Naturaleza, liberando la generación, somete, entre tanto, la conservación de la especie a una prueba de las más severas, escogiendo dentro de un gran número de individuos los que juzga mejores, y sólo a éstos preserva para la perpetuación de la especie; el hombre limita la procreación y se esfuerza denodadamente para que cada ser, una vez nacido, se conserve a cualquier precio. Esta corrección de la voluntad divina le parece ser tan sabia como humana, y él se alegra más de una vez por haber sobrepujado a la Naturaleza y hasta haber demostrado la insuficiencia de la misma. Y el hijo de Adán no quiere ver ni oír hablar que, en realidad, el número es limitado, pero a costa del abatimiento del individuo. Siendo limitada la procreación, por disminución del número de nacimientos, sobreviene, en lugar de la natural lucha por la vida (que sólo deja en pie al más fuerte y al más sano), como lógica consecuencia, el prurito de "salvar" a todo trance también al débil y hasta al enfermo, cimentando el germen de una progenie que irá degenerando progresivamente, mientras persista ese escarnio de la Naturaleza y sus leyes. El resultado final es que un pueblo tal perderá algún día el derecho a la existencia en este mundo, pues el hombre puede, durante un cierto tiempo, desafiarlas leyes eternas de la conservación, pero la venganza vendrá, más tarde o más temprano. Una generación más fuerte expulsará a los débiles, pues el ansia por la vida, en su última forma, siempre romperá todas las corrientes ridículas del llamado espíritu de humanidad individualista. En su lugar aparecerá una Humanidad natural, que destruirá la debilidad para engendrar la fuerza.”

Adolf Hitler (1889–1945) Führer y Canciller Imperial de Alemania. Líder del Partido Nazi

Mi Lucha

John Boyne Foto
Victor Hugo Foto

“(…) Vivimos en una sociedad sombría. Lograr el éxito, ésta es la enseñanza que, gota a gota, cae de la corrupción a plomo sobre nosotros.

Digamos, sin embargo, que eso que se llama éxito es algo bastante feo. Su falso parecido con el mérito engaña a los hombres. Para la muchedumbre, el triunfo tiene casi el mismo aspecto que la supremacía. El éxito, este artificio del talento, tiene una víctima a quien engañar: la historia. Juvenal y Tácito son los únicos que protestan. En nuestros días, ha entrado como sirviente en casa del éxito una filosofía casi oficial, que lleva la librea de su amo y le rinde homenaje en la antecámara. Hay que tener éxito: ésa es la teoría. La prosperidad supone capacidad. Ganen la lotería y ya serán capaces. El que triunfa es objeto de veneración. Todo consiste en nacer de pie. Tengan suerte, lo demás ya llegará; sean felices, y los considerarán grandes. Fuera de cinco o seis excepciones importantes, que constituyen la luz de un siglo, la admiración contemporánea no es más que miopía. Lo dorado es considerado oro. No importa ser un cualquiera, si se llega el primero. El vulgo es un viejo Narciso que se adora a sí mismo y que celebra todo lo vulgar. Esa facultad enorme, por la cual el hombre se convierte en Moisés, Esquilo, Dante, Migue Ángel o Napoleón, la multitud la concede por unanimidad y por aclamación a quien logra su objetivo, sea quien fuere. Que un notario se transforme en diputado; que un falso Corneille haga el Tiridate; que un eunuco llegue a poseer un harén; que un militar adocenado gane por casualidad la batalla decisiva de una época; que un boticario invente las suelas de cartón para el ejército del Sambre-et-Meuse y obtenga, con aquel cartón vendido como cuero, una renta de cuatrocientos mil francos; que un buhonero contraiga matrimonio con la usura, y tenga de ella por hijos siete y ocho millones, de los cuales él es el padre y ella, la madre; que un predicador llegue a obispo por la gracia de ser gangoso; que un intendente de buena casa, al dejar el servicio, sea tan rico que lo nombren ministro de Hacienda; no importa: los hombres llaman a eso Genio, tal como Belleza a la figura de Mousqueton, y Majestad al talante de Claudio, confundiendo así con las constelaciones del abismo las huellas estrelladas que dejan en el lodo blando las patas de los gansos.”

Les Misérables

Pablo Neruda Foto

“Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni de dónde,
te amo directamente sin problemas ni orgullo:
así te amo porque no sé amar de otra manera,

sino así de este modo en que no soy ni eres,
tan cerca que tu mano sobre mi pecho es mía,
tan cerca que se cierran tus ojos con mi sueño.”

Pablo Neruda (1904–1973) poeta

The Essential Neruda: Selected Poems
Variante: Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni de dónde, te amo directamente sin problemas ni orgullo: así te amo porque no sé amar de otra manera, sino así de este modo en que no soy ni eres, tan cerca que tu mano sobre mi pecho es mía, tan cerca que se cierran tus ojos con mi sueño.

John Katzenbach Foto

“Las ideas son incluso más peligrosas que las armas, sólo que su efecto no es tan inmediato.”

John Katzenbach (1950) escritor estadounidense

State of Mind

Zygmunt Bauman Foto
Patrick Rothfuss Foto

“Quizá la mayor facultad que posee nuestra mente sea la capacidad de sobrellevar el dolor. El pensamiento clásico nos enseña las cuatro puertas de la mente, por las que cada uno pasa según sus necesidades.
La primera puerta es la puerta del sueño. El sueño nos ofrece un refugio del mundo y de todo su dolor. El sueño marca el paso del tiempo y nos proporciona distancia de las cosas que nos han hecho daño. Cuando una persona resulta herida, suele perder el conocimiento. Y cuando alguien recibe una noticia traumática, suele desvanecerse o desmayarse. Así es como la mente se protege del dolor: pasando por la primera puerta.
La segunda es la puerta del olvido. Algunas heridas son demasiado profundas para curarse, o para curarse deprisa. Además, muchos recuerdos son dolorosos, y no hay curación posible. El dicho de que <> es falso. El tiempo cura la mayoría de las heridas. El resto están escondidas detrás de esa puerta.
La tercera es la puerta de la locura. A veces, la mente recibe un golpe tan brutal que se esconde en la demencia. Puede parecer que eso no sea beneficioso, pero lo es. A veces, la realidad es solo dolor, y para huir de ese dolor, la mente tiene que abandonar la realidad.
La última puerta es la de la muerte. El último recurso. Después de morir, nada puede hacernos daño, o eso nos han enseñado.”

The Name of the Wind
Variante: Quizá la mayor facultad que posee nuestra mente sea la capacidad de sobrellevar el dolor. El pensamiento clásico nos enseña las cuatro puertas de la mente, por las que cada uno pasa según sus necesidades.
La primera es la puerta del sueño. El sueño nos ofrece un refugio del mundo y de todo su dolor. El sueño marca el paso del tiempo y nos proporciona distancia de las cosas que nos han hecho daño. Cuando una persona resulta herida, suele perder el conocimiento. Y cuando alguien recibe una noticia traumática, suele desvanecerse o desmayarse. Así es como la mente se protege del dolor: pasando por la primera puerta.
La segunda es la puerta del olvido. Algunas heridas son demasiado profundas para curarse, o para curarse deprisa. Además, muchos recuerdos son dolorosos, y no hay curación posible. El dicho de que «el tiempo todo lo cura» es falso. El tiempo cura la mayoría de las heridas. El resto están escondidas detrás de esa puerta.
La tercera es la puerta de la locura. A veces, la mente recibe un golpe tan brutal que se esconde en la demencia. Puede parecer que eso no sea beneficioso, pero lo es. A veces, la realidad es solo dolor, y para huir de ese dolor, la mente tiene que abandonar la realidad.
La última puerta es la de la muerte. El último recurso. Después de morir, nada puede hacernos daño, o eso nos han enseñado.

Charles Bukowski Foto

“1Morir en el suelo de la cocina a las siete de la mañana mientras otra gente hace huevos fritos no es tan grave salvo cuando te pasa a ti.”

Charles Bukowski (1920–1994) escritor y poeta estadounidense

Variante: Morir en el suelo de la cocina a las siete de la mañana mientras otra gente hace huevos fritos no es tan grave salvo cuando te pasa a ti.

Rosa Montero Foto
Wisława Szymborska Foto
Esta traducción está esperando su revisión. ¿Es correcto?
John Wesley Foto
Blaise Pascal Foto
Charles Bukowski Foto
Charles Bukowski Foto
Michael Jackson Foto
Sócrates Foto

“La sabiduría es saber qué tan poco sabemos.”

Sócrates (-470–-399 a.C.) filósofo griego clásico ateniense
Juan Bosch Foto
Albert Hofmann Foto

“Hay experiencias de las que la mayoría de nosotros no se atreven a hablar, porque no se ajustan a la realidad cotidiana y desafían toda explicación racional. No se trata de particulares ocurrencias externas, sino más bien de acontecimientos de nuestra vida interior, que generalmente son descartados como invenciones de la imaginación y excluidos de nuestra memoria. De repente, el punto de vista familiar de nuestro entorno se transforma de una manera extraña, deliciosa, o alarmante: se nos aparece bajo una nueva luz, adquiere un significado especial. Esta experiencia puede ser tan ligera y fugaz como un soplo de aire, o puede que se grabe profundamente en nuestras mentes.
Un encantamiento de ese tipo, que yo experimenté en la infancia, se ha mantenido muy vivo en mi memoria desde entonces. Sucedió una mañana de mayo - se me ha olvidado el año - pero todavía puedo señalar el lugar exacto donde ocurrió, en una pista forestal en Martinsberg, junto a Baden, Suiza. Mientras caminaba por los bosques verdes, llenos de cantos de pájaros e iluminados por el sol de la mañana, todo a la vez se apareció bajo una luz extrañamente clara. ¿No sería algo que yo no hubiera sido capaz de percibir antes? ¿Estaba descubriendo de repente el bosque de primavera, tal como parecía en realidad? Brillaba con el resplandor más bello, hablando al corazón, como si quisiera acompañarme en su majestuosidad. Estaba lleno de una sensación indescriptible de alegría, unidad y maravillosa seguridad.
No tengo idea de cuánto tiempo me quedé allí fascinado. Pero recuerdo la preocupación que sentí cuando el resplandor se disolvió lentamente y yo caminaba: ¿cómo podía una visión que era tan real y convincente, tan directa y profundamente sentida - como podía terminar tan pronto? ¿Y cómo podría yo hablarle a nadie sobre esto, ya que mi alegría desbordante me obligaba a hacerlo, ya que sabía que no había palabras para describir lo que había visto? Parecía extraño que yo, como un niño, hubiera visto algo tan maravilloso, algo que los adultos, obviamente, no perciben - porque yo nunca había oído hablar de ello.
Cuando todavía era un niño, viví algunos otros de estos momentos de profunda euforia en mis paseos por bosques y prados. Fueron estas experiencias las que dieron forma a las líneas principales de mi visión del mundo y me convencieron de la existencia de una realidad milagrosa, impactante, insondable, que estaba oculto a la visión cotidiana.”

Albert Hofmann (1906–2008) químico suizo
José Antonio Primo de Rivera Foto
Fernando Savater Foto
Theodore Kaczynski Foto
Amado Nervo Foto
Emil Cioran Foto

“Soy un simple accidente; ¿Por qué tomármelo todo tan en serio?”

Emil Cioran (1911–1995) filósofo y ensayista rumano

Después de que su madre le dijo que si hubiera sabido que iba a ser tan infeliz hubiera abortado.

“¿Cuál es la razón de que sea tan fuerte el Bien?. Es sólo un camino. Yo nunca intentaré ni podré definirlo. Es básicamente odio a la Humanidad. Yo no tengo amigos, son chicos que se alían conmigo. Si mi novia se muere, yo no lloraré, abusaré del cadáver.”

Øystein Aarseth (1968–1993) músico noruego

Fuente: Entrevista a Euronymous. Publicada en la revista The Sentinel, Rock & Metal site, publicada originalmente por la revista noruega Beat no.2 en 1993. La entrevista está coeditada por Lord Sauron y traducida al español por Burninboy. http://www.thesentinel.es/entrevista_euronymous.htm Consultado el 13 de febrero de 2019.

Cristóbal Colón Foto

“Nunca tan hermosa cosa vido [vio].”

Cristóbal Colón (1451–1506) explorador, navegante y descubridor

Refiriéndose a Cuba en su Diario.Relación de viajes.

Rapsusklei Foto
Zygmunt Bauman Foto
Thomas Hardy Foto
Jorge Luis Borges Foto
Oscar Wilde Foto
Rick Riordan Foto
Sherrilyn Kenyon Foto

“Se mecen los árboles bajo la lluvia
tan armoniosamente
que le dan a uno ganas de ser árbol.”

Jaime Sabines (1926–1999) poeta y político mexicano

Yuria / Poemas Sueltos

Esta traducción está esperando su revisión. ¿Es correcto?
Kurt Gödel Foto
Jim Morrison Foto

“Tan solo estaba explorando los límites de la realidad. Tenía curiosidad por ver qué pasaría. Eso era todo: simple curiosidad.”

Jim Morrison (1943–1971) cantante, compositor y poeta estadounidense

Fuente: Angle, Alexander. El diario de Oliver Cruz. Editorial Lulu.com, 2012. ISBN 9781471685385, p. 7,

Oliver Cromwell Foto

“Nunca se va tan lejos como cuando no se sabe a dónde se va.”

Oliver Cromwell (1599–1658) político y militar inglés

Sin fuentes

Adolf Hitler Foto
Heródoto Foto
Francisco Franco Foto

“Querido hermano: Recibo atónito tu carta y me asombro de los sanos consejos que en ella me das.
Tienes formado muy mal concepto de las fuerzas republicanas y excesivamente bueno de las monárquicas y de lo que representa el trono.
Siguiendo la monarquía en España, ya conoces el rumbo de la nación. La nobleza, que se considera casta superior, en su mayoría descendientes bastardos de otros nobles, viviendo a costa del país al amparo de la monarquía, con delegaciones regias, negocios dudosos, puestos políticos influyentes, y escarneciendo a las clases inferiores -más morales cuanto más inferiores- con sus desenfrenos de todos conocidos.
El alto clero y las congregaciones, que tienen su principal apoyo en la dinastía reinante, asfixiando las libertades públicas con sus demandas y desafueros, llevándose en forma directa o indirecta un buen trozo del presupuesto, mientras el país languidece y la incultura perdura por falta de escuelas y elementos de enseñanza, pues en los presupuestos no queda dinero para tan perentorias atenciones.
Los príncipes, infantes y demás parientes más o menos cercanos al trono, hacen truculentos negocios con el amparo que les presta el poder.
El ejército, que debiera ser servidor de la nación, hoy sólo sirve al trono y, para proteger a éste, se atreve a ametrallar al pueblo ansioso de recuperar su soberanía, atropellada y escarnecida por la dictadura borbónica.
Mientras, el ejército se apropia el oficio de verdugo de la nación, descuida su eficiencia guerrera y es tan sólo una caricatura de lo que debiera ser.
En cambio, se lleva la tercera parte de los presupuestos nacionales.
La vieja política, desacreditada, dando origen al golpe de Estado del año 23, llegó a aquel punto de descrédito, gobernando, o mejor dicho, desgobernando las clases monárquicas en cooperación con el poder moderador - por no llamarle absoluto - de ese trono que tanto defiendes.
En la monarquía no aparecen valores nuevos. Las mismas causas de antaño producirán los mismos efectos.
Tras una nueva etapa de desgobierno, funesta, desde luego, vendrá otra etapa de dictadura, que completará la labor de la dictadura anterior, terminando de ahogar todo espíritu liberal y ciudadano y convirtiéndonos en lo que son hoy algunas repúblicas americanas.
Los pocos ciudadanos que pueden, para no morir a manos reaccionarias tendrán que emigrar, perdiéndose para España los valores que ellos representan.
Los generales -incapaces- que hoy se agrupan en torno del trono para defenderlo, no llevan otras miras que evitar la llegada de un orden nuevo, en el que por su incapacidad no tendrían puesto decoroso; y para salvar su actual posición privilegiada, defienden a su señor con instinto y dote de esclavos, tratando de poner una vez más el ejército enfrente del pueblo.
Esto, que sucedió otras veces, ya no lo conseguirán, y el soldado y el oficial se pondrán al lado de aquél para ayudarle a sacudir sus yugos legendarios y hacer justicia, su justicia, la verdadera justicia, la justicia popular.
El pueblo paga al ejército y al trono para que le sirvan y no para que lo tiranicen, y cuando se cansa de pagar servidores desleales, está en su legítimo derecho a prescindir de ellos.
El trono rompió la constitución, que es el pacto que tenía con el pueblo; roto el pacto, al pueblo, sólo al pueblo, corresponde rehacerlo o elegir el régimen de gobierno que le ofrezca más sólida garantía de progreso y bienestar.
Un régimen que por evoluciones parlamentarias y no por revoluciones sangrientas consiga que no sea un mito el significado de las tres palabras "Libertad, Igualdad, Fraternidad".
Ese régimen no puede ser ya la monarquía, puesto que ha demostrado cumplidamente que sólo satisface sus egoísmos, sin importarle un ardite las necesidades del país.
El mundo en pocos años ha evolucionado rápidamente. Casi todas las naciones de Europa están hoy constituidas en repúblicas, lo están todas las de América. Los que sentimos el culto de la patria, debemos quererla republicana, única forma de que progrese y se coloque al nivel del resto de Europa, respecto al cual vamos atrasados muchos años.
Una república moderada sería la solución al actual estado de cosas.
Ella atraería a la gobernación del país a las clases privilegiadas sin espantarlas ni ponerles enfrente, como sucedería con el establecimiento de una república radical.
Los elementos más radicales la respetarían, porque verían siempre en ella la posibilidad de evolucionar hacia sus ideales, tratando de ganar puestos en los comicios con su conducta, sus programas y una adecuada propaganda.
El país se gobernaría en definitiva como quisiera y evitaríamos la llegada de una revolución que camina con pasos de gigante y que cuanto más tarde más violenta ha de ser.
Dices en tu carta con un profundo desconocimiento que las izquierdas son averiada mercancía. ¡Mercancía y bien averiada son las derechas! ¡Ya hemos visto cómo se vendían o alquilaban! Lo poco bueno que en ellas quedaban, se ha marchado a la república, por no convivir con tanto profesional de la indignidad y de la falta de decoro. Los partidos monárquicos ¡¡ésos sí que son averiada mercancía!!”

Francisco Franco (1892–1975) general y dictador español

Carta de Ramón Franco a su hermano
Fuente: "Autobiografía del general Franco" de Manuel Vázquez Montalbán.

Salomón Foto
Silvio Rodríguez Foto
Arturo Pérez-Reverte Foto
Confucio Foto
Bartolomé de las Casas Foto
Avril Lavigne Foto
Héctor Abad Faciolince Foto
Julio Cortázar Foto

“Creo que no te quiero, que solamente quiero la imposibilidad tan obvia de quererte como la mano izquierda enamorada de ese guante que vive en la derecha.”

Julio Cortázar (1914–1984) escritor argentino

Save Twilight: Selected Poems
Salvo el crepúsculo
Variante: Creo que no te quiero, que solamente quiero la imposibilidad tan obvia de quererte. Como el guante izquierdo enamorado de la mano derecha.

José Joaquín de Olmedo Foto

“Los legisladores deben ser tan imparciales, tan impasibles como las leyes; los legisladores no deben dejar en su obra las huellas detestables de las pasiones.”

José Joaquín de Olmedo (1780–1847) Abogado, escritor y político guayaquileño. (Guayaquil, 20 de marzo de 1780 - ibídem, 19 de febrero de 1847)

Sin fuentes

Anahí Puente Foto

“Creo que todos nos hemos sentido así en algún momento. De hecho la palabra 'perdónate' no estaba en la letra, pero al estar grabando la canción, lo dije y quise que así se quedara porque me salió del corazón. Cuando estamos sufriendo por cualquier situación, cuando estamos dentro del problema, nos vemos las cosas claramente pero después descubres que todo pasa y que la vida es tan perfecta que se encarga de sanar cada lágrima. La canción es triste y alentadora a la vez”

Anahí Puente (1983) celular

Fuente: Anahí sobre las metáforas y el significado de su canción Absurda, para revista Caras México, 2013.
Fuente: [Entrevista completa: Anahí revista Caras 2013, http://anahiworldargentinaoficial.blogspot.com.ar/2013/03/entrevista-completa-anahi-revista-caras.html, 16 de marzo de 2013, 3 de marzo de 2013]

Rubén Darío Foto

“No dejes apagar el entusiasmo, virtud tan valiosa como necesaria; trabaja, aspira, tiende siempre hacia la altura.”

Rubén Darío (1867–1916) poeta nicaragüense

Sin fuentes
Variante: No dejes apagar el entusiasmo, virtud tan valiosa como necesaria; trabaja, aspira, tiende siempre hacia la altura

Golda Meir Foto
Mercedes Sosa Foto

“Es porque soy tan testaruda que todavía insisto en cambiar el mundo.”

Mercedes Sosa (1935–2009) cantante de música folclórica argentina

Sin fuentes

Julio Cortázar Foto

“Todo tan insuficiente, tan de más o de menos.”

Rayuela: 50 Edición conmemorativa

Clarice Lispector Foto
Juan Rulfo Foto
Alberto Chimal Foto
Stephen King Foto
Jean Paul Sartre Foto

“Lo que me asombra es sentirme tan triste y tan cansado.”

Jean Paul Sartre (1905–1980) filósofo, escritor y activista francés
Thomas Sowell Foto
Yasunari Kawabata Foto
William Shakespeare Foto
Wisława Szymborska Foto
Terry Pratchett Foto
Raymond Chandler Foto
Max Lucado Foto
Esta traducción está esperando su revisión. ¿Es correcto?
Helen Keller Foto

“Solos podemos hacer muy poco; juntos podemos hacer mucho.”

Helen Keller (1880–1968) escritora, oradora y activista política sordociega estadounidense y teosofia
Esta traducción está esperando su revisión. ¿Es correcto?
Ralph Waldo Emerson Foto
Dante Alighieri Foto
Jean Paul Sartre Foto

“Existo. Es algo tan dulce, tan dulce, tan lento. Y leve; como si se mantuviera sólo en el aire. Se mueve. Por todas partes, roces que caen y se desvanecen. Muy suave, muy suave.”

Jean Paul Sartre (1905–1980) filósofo, escritor y activista francés

La Náusea
Variante: Existo. Es algo tan dulce, tan dulce, tan lento. Y leve; como si se mantuviera solo en el aire. Se mueve. Por todas partes, roces que caen y se desvanecen. Muy suave, muy suave
Fuente: Citado en Tallis, Raimond. El reino del espacio infinito: Un viaje fantástico alrededor de la cabeza humana. Editorial Grupo Planeta Spain, 2009. ISBN 9788483078655, pp. 48-49.

William Shakespeare Foto